Síndrome colinérgico, agudo

Definición y etiologíaArriba

El síndrome colinérgico es un conjunto de síntomas producidos por la estimulación de los receptores muscarínicos y nicotínicos debido a un exceso de acetilcolina o por sustancias exógenas que estimulan al sistema nervioso parasimpático.

Causas:

1) intoxicación por compuestos organofosforados (pesticidas o gases tóxicos constituyentes de armas químicas [tabún, sarín, somán]) o por carbamatos

2) sobredosis de fármacos colinérgicos (p. ej. de pilocarpina).

Cuadro clínico y diagnósticoArriba

Ansiedad, agitación y síntomas de estimulación de receptores:

1) muscarínicos: eritema cutáneo, miosis, visión borrosa, sialorrea y broncorrea peligrosa (que puede aparentar un edema pulmonar), broncoconstricción, tos, disnea, lagrimeo, diaforesis, cólico intestinal, diarrea, bradicardia, incontinencia urinaria y fecal

2) nicotínicos (habitualmente por carbacol, metacolina, etc.): fasciculaciones, debilidad muscular hasta parálisis completa (también del diafragma), taquicardia, hipertensión arterial.

En el diagnóstico de la intoxicación por pesticidas, gases tóxicos organofosforados o por carbamatos, la determinación de la actividad de acetilcolinesterasa (AChE) en los glóbulos rojos o en el suero tiene una importancia fundamental. La reducción de la AChE no es proporcional a la gravedad de la intoxicación. Puede mantenerse reducida durante varias semanas a pesar de cesar los síntomas de intoxicación.

Diagnóstico diferencial

Hipervagotonía (dura poco y los síntomas son poco pronunciados); disnea relacionada con broncorrea y broncoconstricción: edema pulmonar, lesión tóxica del aparato respiratorio por gases irritantes; debilidad muscular: miastenia o crisis pseudomiasténica; cólico y diarrea: enfermedades agudas del tracto digestivo.

TratamientoArriba

En la unidad de cuidados intensivos.

1. Monitorizar la función cardíaca y respiratoria.

2. Administrar oxigenoterapia (sobre todo previo a la atropinización planificada).

3. Administrar fármacos: atropina, inyectar 1-5 mg (de preferencia iv.), repetir la dosis cada varios minutos hasta la reducción de las secreciones bronquiales y la disnea (la dosificación debe realizarse para que no sea necesario aspirar el exceso de secreciones más de una vez cada hora). La frecuencia cardíaca debería ser de >80/min. Una excesiva sequedad de las mucosas y de la piel, y una frecuencia cardíaca >120/min son signos de que la dosis de atropina es demasiado elevada. En caso de presencia de síntomas de acción de atropina, mantener la dosificación en 1-2 mg/h. En caso de intoxicación por compuestos organofosforados (pesticidas o gases tóxicos) → reactivadores de AChE: oximas (eficaces en la fase temprana de la intoxicación durante las horas siguientes a la exposición, administrar siempre tras una dosis previa de atropina), obidoxima 250 mg cada 4-6 h o pralidoxima y 30 mg/kg cada 4-6 h. En caso de agitación excesiva o convulsiones → diazepam 10 mg iv., repetir si es necesario.

4. En caso de trastornos respiratorios graves es necesaria la intubación endotraqueal para aspirar el exceso de secreciones bronquiales y mantener la oxigenación, si están indicados. No administrar suxametonio, aminofilina, teofilina, morfina, glucocorticoides ni furosemida.