Diuresis, alteraciones

1. Disuria: micción dolorosa y/o con dificultad (a gotas, chorro débil o entrecortado). Puede acompañarse de sensación de ardor en la uretra o tenesmo vesical.

Causas: enfermedades de la uretra (más frecuentemente uretritis), vejiga (sobre todo ITU), próstata (fundamentalmente la hiperplasia benigna, pero puede ser por procesos neoplásicos), uréteres, pelvis renal, riñones y genitales femeninos, trastornos mentales.

Diagnóstico: anamnesis (tener en cuenta las enfermedades de transmisión sexual) y exploración física que incluya orificio uretral, genitales, y próstata en hombres; exploración ginecológica; análisis de orina y del sedimento; urocultivo en caso de sospecha de ITU; examen y/o cultivo de secreción uretral en caso de sospecha de infección de transmisión sexual; ecografía del sistema urinario. Después de descartar las causas conocidas de disuria hay que tener en cuenta el posible origen psíquico de las molestias referidas.

2. Oliguria: eliminación de <500 ml (<70 ml por 10 kg) de orina al día.

3. Anuria: eliminación de <100 ml de orina al día. Causas: LRA (prerrenal, renal o posrenal), insuficiencia renal terminal que requiere tratamiento de reemplazo renal. Diagnóstico: determinación de la forma y causa de la LRA, diagnóstico diferencial con enfermedad renal crónica →Lesión renal aguda.

4. Poliuria: eliminación persistente de >2500 ml de orina al día. Puede ser consecuencia de la alteración de la concentración de orina por los riñones o (menos frecuentemente) de un aporte excesivo de líquidos y en raras ocasiones de diabetes insípida central o nefrogénica. La poliuria generalmente se acompaña de polidipsia →Polidipsia. Las causas y el diagnóstico de poliuria son las mismas que las de polidipsia.