Disfagia y odinofagia

La disfagia es una sensación subjetiva de dificultad en la deglución, o en el paso de los alimentos sólidos o líquidos desde la boca hasta el estómago. Puede percibirse como dificultad para formar un bolo de alimento y avanzarlo desde la boca hasta la faringe y el esófago (disfagia orofaríngea o alta), o sensación de globo retroesternal, de expansión u opresión en el tórax, obstrucción en el esófago o detención de los alimentos durante el pasaje por el esófago (disfagia esofágica). Por otra parte, se distingue la disfagia motora, en la que se han excluido otras causas orgánicas importantes y el reflujo gastroesofágico.

La odinofagia consiste en la deglución dolorosa (típicamente, el dolor es retroesternal, durante el pasaje de bolo alimenticio por el esófago). A veces también se refiere a un dolor percibido en la faringe durante la deglución (odinofagia orofaríngea).

Causas

1. Causas de disfagia orofaríngea

1) lesiones estructurales: inflamaciones (de la mucosa bucal, faríngea, amigdaliana, absceso, sífilis), neoplasias (laringe, lengua, suelo de la boca), compresión extrínseca (bocio, linfadenopatía), graves lesiones degenerativas de la columna vertebral, estados tras intervenciones quirúrgicas de la laringe, cráneo y cuello, cuerpos extraños

2) trastornos neuromusculares: con mayor frecuencia enfermedades cerebrovasculares (ACV isquémico, embolia, hemorragia intracerebral), síndrome bulbar y pseudobulbar, tumores cerebrales, alteraciones postraumáticas; con menor frecuencia tabes dorsales, enfermedades neurodegenerativas, síndromes extrapiramidales (enfermedad de Parkinson, corea de Huntington, discinesia tardía), neuropatías periféricas (en el curso de diabetes, sarcoidosis, síndrome de Sjögren, amiloidosis), enfermedades sistémicas del tejido conectivo (esclerosis sistémica, LES, dermatomiositis), síndrome de Guillain-Barré, difteria, botulismo, poliomielitis, miastenias y síndromes miasténicos, miopatías (distrofia muscular oculofaríngea, distrofia muscular facioescapulohumeral, miopatías mitocondriales, distrofia miotónica).

2. Causas de disfagia esofágica

1) estenosis esofágica (cuando la luz del esófago ≤12 mm): con mayor frecuencia cáncer de esófago y de cardias, complicaciones de la enfermedad por reflujo gastroesofágico; más raramente divertículos esofágicos (divertículo de Zenker), estenosis tras quemaduras por sustancias corrosivas, inducida por fármacos (p. ej. KCl, salicilatos), tras radioterapia por neoplasias adyacentes, anillo de Schatzki, cuerpos extraños, lesiones por presión por sonda nasogástrica

2) trastornos de la motilidad: acalasia, espasmo esofágico difuso (esófago en cascanueces), esclerosis sistémica, diabetes, enfermedad de Chagas, fármacos (nitratos, calcioantagonistas, estrógenos, metilxantinas)

3) compresión extrínseca del esófago: valvulopatía mitral, bocio retroesternal, tumores del mediastino y bronquiales, hernia paraesofágica, cirugía cardíaca y torácica.

3. Causas de odinofagia

1) esofagitis: infecciosa (provocada por hongos [Candida, Histoplasma, Blastomyces], virus [VHS, CMV, VIH], bacterias [bacilo de tuberculosis]), erosiva (en el curso de la enfermedad por reflujo gastroesofágico), por radiación, lesiones en la mucosa causadas por fármacos (preparados de potasio, doxiciclina, bisfosfonatos, AINE)

2) cáncer de esófago

3) cuerpo extraño en el esófago

4) quemadura esofágica por sustancias corrosivas

Diagnóstico

La disfagia y odinofagia son signos de alarma → descartar con urgencia una neoplasia de esófago y cardias.

1. Anamnesis y exploración física. Determinar si la alteración se encuentra en fase

1) orofaríngea: se presentan dificultades en la formación de bolo alimenticio y avanzarlo en dirección a la faringe, así como dificultad para iniciar la ingesta tanto de líquidos como de alimentos sólidos, que puede manifestarse por tos seca, regurgitación nasofaríngea, asfixia, sensación de picazón faríngea, estornudos, lagrimeo durante la ingesta de líquidos y alimentos sólidos

2) esofágica: sensación de obstrucción durante la deglución (al inicio generalmente de los alimentos sólidos), sensación de expansión o presión torácica, vómitos, tos y expectoración, y a veces dolor durante la deglución.

2. Exploraciones complementarias

1) endoscopia del tracto gastrointestinal superior: esencial en el diagnóstico de la disfagia esofágica, permite tomar biopsias para el examen histológico de las alteraciones macroscópicas y frotis por cepillado para el examen micológico (en caso de sospecha de micosis)

2) radiografía de la faringe y esófago con contraste administrado VO: diagnóstico de las causas de disfagia esofágica (trastornos de la motilidad esofágica, presencia de divertículos o cuerpo extraño en el esófago, y complementaria en obstrucciones orgánicas); examen fluoroscópico del proceso de la deglución en el diagnóstico de la disfagia orofaríngea

3) manometría esofágica (de preferencia de alta resolución): exploración complementaria, necesaria en el estudio de los trastornos motores del cuerpo y esfínter esofágico inferior

4) pH-metría o pH-metría con impedanciometría esofágica: necesaria para excluir la enfermedad de reflujo gastroesofágico e identificar la disfagia funcional.