¿El mismo factor desencadenante puede provocar distintas manifestaciones cutáneas dependiendo de la edad (comparando a los niños con los adultos)?
Barbara Mathes: ¿Puede el mismo factor desencadenante originar diferentes respuestas cutáneas en niños que en adultos? Diría que hasta cierto punto sí. Muchas erupciones cutáneas tienen el mismo aspecto tanto en niños como en adultos o se desencadenan por el mismo factor, salvo que lleguemos a los virus. Pienso que un ejemplo clásico es la varicela que en niños es originada por el virus de la varicela zóster. Este virus, una vez contraído en la infancia, nunca desaparece y puede reactivarse, manifestándose en el adulto como “culebrilla” o herpes zóster. Otro ejemplo es el parvovirus B19. En niños provoca una afección llamada quinta enfermedad o eritema infeccioso que causa erupción en las mejillas y el tórax. Nosotros la llamamos enfermedad de la bofetada (las mejillas se ponen muy rojas) pero si los adultos se contagian con este virus y tienen una erupción, esta de hecho a menudo aparece en sus manos y pies, es el denominado síndrome papular purpúrico en “guante y calcetín”. Entonces el mismo virus se manifiesta de manera diferente en adultos y en niños. No obstante, la mayoría de las demás erupciones tienen el mismo aspecto.