El Dr. Mark Crowther es profesor y jefe del Departamento de Medicina, y presidente de Leo Pharma en el Área de Investigación sobre Tromboembolismo de la McMaster University.
¿Podría hablarnos del uso de la dosis baja de los anticoagulantes orales directos (ACOD) en el tromboembolismo venoso (TEV)?
Mark Crowther (MD, MSc): Las dosis bajas de los anticoagulantes orales directos (ACOD), tanto del apixabán como del rivaroxabán, han sido estudiadas en relación con la prevención secundaria a largo plazo del TEV. Curiosamente, los resultados obtenidos difieren un poco entre sí.
En cuanto al apixabán, podría decirse que el estudio ha demostrado unos resultados muy buenos. Creo que, en caso de tener un paciente que toma 5 mg de apixabán dos veces al día por vía oral —que es la dosis habitual—, la mayoría de nosotros reduciría esta dosis a 2,5 mg dos veces al día durante 6 meses, apoyándose en los resultados del estudio complementario de apixabán [AMPLIFY-EXT].
El estudio ha resultado menos claro para el rivaroxabán. El descenso de 20 a 10 mg no se asoció con un claro beneficio neto para el paciente.
En mi propia práctica clínica, no suelo reducir la dosis del rivaroxabán, pero sí la del apixabán. Uno puede estar seguro de que la dosis reducida de apixabán se asocia con un bajo riesgo de trombosis recurrente así como de sangrado.