John Kolbe, MD, PhD, es pulmonólogo del Auckland City Hospital, profesor de medicina y director del Departamento de Medicina de la University of Auckland, Nueva Zelanda.
Una vez detectada la bronquiectasia, ¿quién debe estar derivado para los cuidados especializados?
No puedo basar mi respuesta en ninguna evidencia, pero creo que son los pacientes con una etiología específica de la bronquiectasia, pacientes con una enfermedad grave o con alta morbilidad. Así que, [se trata de] este tipo de etiologías... Creo que se podría derivar a los pacientes con hipogammaglobulinemia o discinesia ciliar primaria porque tienden a tener una enfermedad progresiva.
Creo que la aspergilosis broncopulmonar alérgica es difícil de tratar porque se está intentando prevenir el daño progresivo en las vías respiratorias y, al mismo tiempo, proteger al paciente de los efectos adversos de los glucocorticoides. Creo que, si el manejo de estos pacientes presenta algún reto, se debe derivarlos.
La decisión sobre la derivación o no de los pacientes con bronquiectasia asociada a enfermedades reumatológicas o a la enfermedad inflamatoria intestinal depende de las circunstancias. Con respecto a la gravedad, recomiendo derivar a aquellos que presentan anomalías importantes en la imagen tomográfica o un visible deterioro de la función pulmonar, y también aquellos que tienen una enfermedad visiblemente progresiva.
Finalmente hay pacientes con alta morbilidad a pesar de los mejores esfuerzos terapéuticos. Se trata de las personas con tos crónica importante y producción de esputo, las personas con exacerbaciones frecuentes y con complicaciones. Además, creo que es necesario derivar a los pacientes que se consideran aptos para la resección o —supongo que esto entra en la categoría de la gravedad— las personas que pueden ser candidatos al trasplante pulmonar.