El dr. Imran Satia es profesor ayudante del Departamento de Neumología de la McMaster University.
¿Qué investigaciones deben realizarse en los pacientes con tos crónica antes de derivar a un centro de atención especializada?
Muchas gracias por la pregunta. Es una pregunta muy importante. Y antes de que responda a ella, me parece fundamental resaltar que se debe realizar una anamnesis muy exhaustiva y detallada, porque esto va a determinar las pruebas que se realizarán en el segundo paso. Así que es importante que los médicos indaguen sobre el tipo de tos. ¿Es tos productiva o seca? ¿Es tos con sangre? ¿Hay dificultad respiratoria, sibilancias u opresión torácica? ¿Ha habido fiebre, pérdida de peso o sudores nocturnos? También se debe realizar una buena anamnesis general, preguntando sobre los fármacos como ramipril o lisinopril, que son hipotensores comúnmente utilizados, llamados inhibidores de la enzima convertidora de angiotensina (IECA). Además, es necesario preguntar si el paciente fuma, y —lo que es importante en la actualidad— si vapea.
Pero si todo esto ya se ha hecho, las 3 pruebas más importantes que el médico de cabecera debe realizar antes de derivar a un especialista son: [en primer lugar] hemograma completo para verificar el recuento de eosinófilos. Si la cantidad de eosinófilos está elevada, podemos sospechar asma o incluso bronquitis eosinofílica no asmática.
La segunda [prueba] a realizar es la radiografía de tórax para asegurarse de que no haya infección, neoplasia maligna, alguna enfermedad estructural o pulmonar, como fibrosis pulmonar o bronquiectasia; también se debe buscar la presencia de enfermedad cardíaca para verificar si hay edema o congestión pulmonar, ya que son fáciles de tratar con tratamientos específicos para estas afecciones.
Otra cosa muy importante es una prueba respiratoria sencilla llamada espirometría. Y si está disponible, se debe evaluar la reversibilidad, es decir, administrar 2 inhalaciones de un agonista β2 de acción corta y luego repetir la espirometría para averiguar si es una enfermedad reactiva de las vías respiratorias, lo cual puede ser útil en el diagnóstico de asma.
En resumen, hay 3 pruebas importantes: radiografía de tórax, espirometría con prueba de reversibilidad y hemograma completo. Todo esto después de haber realizado una anamnesis detallada.