Evaluación y feedback: desafíos del profesorado en la educación médica

La Dra. Maja Artandi (MD) es profesora de medicina en el Servicio de Atención Primaria y Salud Poblacional de la Universidad de Stanford, EE. UU., y Copresidenta de la Society of Bedside Medicine. Elabora materiales didácticos para la enseñanza ambulatoria.

La evaluación habitual que suelen recibir los residentes en muchas instituciones es "superior al promedio". ¿Cómo enfrentar la decepción o el enojo de los residentes cuando reciben la calificación "promedio"?

Es un verdadero problema. Voy a responder en dos partes. Primero, ¿por qué todos son "superiores al promedio"? De verdad, es un problema. En mi opinión, se trata de una inflación de notas. En Estados Unidos disponemos de notas del 1 al 9, pero siempre parece que las calificaciones por debajo del 7 no existen. Todos están entre el 7 y el 9, y hoy en día la gente se enoja cuando recibe el 7.

La otra cuestión es que las calificaciones siguen siendo extremadamente subjetivas. Disponemos de mediciones objetivas, pero muchas personas no las utilizan. En su lugar, califican a los residentes de manera subjetiva y, por lo tanto, son víctimas de sesgos, como el sesgo de indulgencia, es decir, piensan "este residente me cae bien, no quiero herir sus sentimientos, así que le voy a dar un sobresaliente y todo va a estar bien".

Ahora, lo que a veces pasa es que alguien sí recibe una calificación de promedio. Y entonces, ¿qué hacemos cuando se enfada mucho? Lo que ocurre con frecuencia es que el residente es tomado por sorpresa porque no recibe un verdadero feedback. Entonces, lo que escucha es: "eres un residente notable", así que espera obtener una calificación "notable" (es decir, 8 o 9) en su hoja de evaluación. Cuando recibe el 7 o incluso el 6, se enfada. Y no es de extrañar, porque no lo esperaba.

Entonces, lo que creo que debemos hacer es preparar a los residentes. Necesitamos hablar con ellos, darles un feedback regular, explicarles que nuestro objetivo es convertirlos en buenos médicos. Y si quiero dar a alguien una calificación promedio, lo preparo para eso. Luego —aunque el residente pueda estar decepcionado—, espero que no se enfade, sino que use esa experiencia para aprender.