Procedimientos endoscópicos en la pancreatitis crónica

La Dra. Marianna Arvanitakis (MD, PhD) es profesora de medicina y Jefa del Consultorio de Enfermedades del Páncreas y Nutrición Clínica del Hôpital Erasme — Cliniques universitaires de Bruxelles, Bélgica. Sus intereses clínicos y de investigación abarcan las enfermedades del páncreas, la nutrición clínica y la endoscopia.

¿Cuándo derivar a un paciente con pancreatitis crónica a un procedimiento endoscópico (colocación de stent en el conducto pancreático, extracción de cálculos del conducto pancreático)?

Hay varios mecanismos que pueden causar dolor en la pancreatitis crónica. El dolor puede deberse a la obstrucción del conducto —por un cálculo o estenosis—, a la inflamación, a la sensibilización neurogénica, a otras complicaciones de la pancreatitis crónica, o incluso a problemas no pancreáticos. Es muy importante entender cuál es el origen del dolor.

Si un paciente tiene una obstrucción obvia —un conducto pancreático dilatado debido a un cálculo o una estenosis— y experimenta dolor, es razonable ofrecerle terapia endoscópica para tratar tal obstrucción. A condición de que, por supuesto, no haya respondido a las primeras líneas de tratamiento, que incluyen administrar analgésicos, abordar los problemas nutricionales y reemplazar las enzimas pancreáticas.

Sabemos que la terapia endoscópica puede ser útil en casos de pancreatitis dolorosa, pero no hay datos que respalden su uso en pacientes que no experimentan dolor. No hay evidencia que demuestre su capacidad de revertir insuficiencia exocrina o endocrina. Por lo tanto, la reservamos exclusivamente para pacientes con pancreatitis crónica dolorosa. Según numerosos estudios de cohorte retrospectivos y prospectivos, sabemos que un alivio parcial o completo del dolor se conseguirá en aproximadamente dos tercios de los pacientes. Todavía estamos esperando los resultados de un ensayo aleatorizado de simulación controlada, que, si bien me acuerdo, estará disponible este año. Sin embargo, ya es algo que podemos ofrecer a nuestros pacientes, con un buen perfil de seguridad, ya que los eventos adversos graves ocurren en <5 % de los casos. Suele ser una buena opción en comparación con la cirugía.

También existen intervenciones quirúrgicas que permiten drenar el conducto pancreático y que son bastante eficaces. Se ha demostrado en ensayos controlados aleatorizados (ECA) que pueden ser ligeramente más eficaces que la terapia endoscópica. Sin embargo, la cirugía en la mayoría de los casos se relaciona con efectos adversos importantes. La mayoría de los pacientes prefiere intentar primero la terapia endoscópica.