En medio de la actual pandemia de la enfermedad por coronavirus 2019 (COVID-19), en la práctica clínica se han utilizado de forma empírica múltiples terapias para abordar la cuestión de lo que se considera como altas tasas de morbilidad y mortalidad en pacientes hospitalizados por COVID-19, sobre todo aquellos de edad avanzada y/o con comorbilidades. Varias terapias, las cuales incluyen el uso de agentes antiinflamatorios, antivirales e inmunomoduladores, están bajo una intensa investigación en ensayos controlados y aleatorizados, en curso y planificados.
El 21 de abril de 2020, el Panel de Guías para el Tratamiento de la COVID-19 del US National Institutes of Health (NIH) publicó unas guías sobre el uso de terapias empíricas en aquellos pacientes con COVID-19 que se encuentran hospitalizados con neumonía viral en planta o en la unidad de cuidados intensivos. Además, se elaboraron recomendaciones para pacientes que recibían medicamentos seleccionados antes de ser hospitalizados.
A menos que se indique lo contrario, todas estas recomendaciones fueron clasificadas por el panel de guías del NIH como "AIII": recomendaciones fuertes basadas en la opinión de expertos.
Fármacos antivirales
- Cloroquina e hidroxicloroquina: No hay suficientes datos clínicos para realizar una recomendación a favor o en contra del uso de cloroquina o hidroxicloroquina en el tratamiento de la COVID-19. En caso de que se utilice cloroquina o hidroxicloroquina, los médicos deben monitorizar a los pacientes en cuanto a los efectos adversos, en especial la prolongación del intervalo QTc.
- Remdesivir: No hay suficientes datos clínicos para realizar una recomendación a favor o en contra del uso de remdesivir en el tratamiento de la COVID-19.
- Hidroxicloroquina + azitromicina; lopinavir/ritonavir: Excepto en el contexto de los ensayos clínicos, el panel recomienda: (a) en contra del uso de hidroxicloroquina más azitromicina, a causa de su potencial de toxicidad, y (b) en contra del uso de lopinavir/ritonavir (AI: recomendación fuerte basada en ≥1 ensayos aleatorizados) u otros inhibidores de la proteasa del VIH, debido a una farmacodinámica desfavorable y la existencia de datos negativos de ensayos clínicos.
Fármacos inmunomoduladores
- Plasma de pacientes convalecientes y terapia con inmunoglobulinas: No hay suficientes datos clínicos para realizar una recomendación a favor o en contra del uso de plasma de pacientes convalecientes o de la terapia con inmunoglobulinas en el tratamiento de la COVID-19.
- Inhibidores de la interleucina: No hay suficientes datos clínicos para realizar una recomendación a favor o en contra del uso de inhibidores de la interleucina-6 (p. ej., sarilumab, siltuximab, tocilizumab) o inhibidores de la interleucina-1 (p. ej., anakinra) en el tratamiento de la COVID-19.
- Interferones e inhibidores de cinasas Janus (JAK): Excepto en el contexto de los ensayos clínicos, el panel recomienda: (a) en contra del uso de interferones, debido a su ineficacia en el tratamiento del síndrome respiratorio agudo severo (SRAS) y el síndrome respiratorio de Oriente Medio (MERS), así como a causa de su toxicidad, y (b) en contra del uso de inhibidores de JAK (p. ej., baricitinib), debido a sus amplios efectos inmunosupresores.
Corticosteroides
- El panel realiza una recomendación en contra del uso rutinario de corticosteroides sistémicos en el tratamiento de la COVID-19 en pacientes hospitalizados, a no ser que estos se encuentren sometidos a cuidados intensivos.
- El panel realiza una recomendación en contra del uso rutinario de corticosteroides sistémicos en el tratamiento de pacientes con COVID-19 sometidos a ventilación mecánica que no sufren síndrome de distrés respiratorio agudo (SDRA).
- Con respecto a los pacientes ventilados mecánicamente con SDRA, no hay evidencia suficiente para realizar una recomendación a favor o en contra del uso de corticosteroides sistémicos (CI: recomendación opcional basada en ≥1 ensayos aleatorizados).
Medicamentos que los pacientes recibían antes de la hospitalización
- Inhibidores de la enzima convertidora de angiotensina (IECA) o antagonistas de los receptores de angiotensina (ARA): los pacientes con COVID-19 que reciben estos fármacos debido a una enfermedad cardiovascular (o por otras indicaciones) deben continuar dicho tratamiento.
- Corticosteroides: una terapia con corticosteroides orales previamente utilizada por otra condición no debe descontinuarse en el momento del diagnóstico de COVID-19. En función de cada caso, pueden indicarse una dosis suplementarias o de estrés de los corticosteroides.
- Estatinas: los pacientes con COVID-19 que reciben terapia con estatinas para el tratamiento o prevención de la enfermedad cardiovascular deben continuar la medicación.
- Antiinflamatorios no esteroideos (AINE): los pacientes con COVID-19 que reciben terapia con AINE deben continuarla aplicando el régimen anteriormente prescrito por el médico.
Conclusiones
El mensaje general de esta guía es que, hasta el momento, no existe un tratamiento clínicamente comprobado que haya demostrado eficacia en la reducción de la morbilidad o la mortalidad de las enfermedades asociadas a la COVID-19. En segundo lugar, cuando se trata de medicamentos prescritos con anterioridad, los pacientes no deben alterar su ingesta ante la COVID-19.