Pronto se publicará una entrevista de McMaster Perspective sobre el tratamiento hospitalario de neumonía por COVID-19.
Contexto: Los inhibidores de las cinasas Janus (o inhibidores de JAK), como el tofacitinib y el upadacitinib, son tirosina-cinasas de administración oral que bloquean las respuestas celulares a multitud de citocinas y factores de crecimiento. Se utilizan en el tratamiento de la artritis reumatoide y otros tipos de artritis inflamatorias. En el ensayo STOP-COVID (Tofacitinib in Hospitalized Patients with COVID-19 Pneumonia), se estudiaron los efectos del tofacitinib en el tratamiento de los pacientes con neumonía causada por COVID-19.
Métodos: Los adultos hospitalizados con neumonía por COVID-19 que participaron en el ensayo se asignaron al azar en dos grupos, en los que recibieron una dosis diaria de tofacitinib a 10 g o placebo 2 veces al día, durante un máximo de 14 días o hasta el alta hospitalaria. Se excluyó a los pacientes que necesitaron ventilación mecánica invasiva o no invasiva u oxigenación por membrana extracorpórea, y a los que presentaron antecedentes de trombosis o trombosis actual. El criterio de valoración primario fue muerte o insuficiencia respiratoria en los 28 días de seguimiento.
Resultados: En total, participaron 289 pacientes, de los cuales el 89 % recibieron glucocorticoides y el 13 % oseltamivir, un antiviral. La incidencia acumulada de muerte o insuficiencia respiratoria a los 28 días fue considerablemente menor en el grupo de tofacitinib (18,1 % vs. 29 %; conciente de riesgo [RR] 0,63; IC 95 %, 0,41-0,97). No se observaron efectos significativos en la mortalidad por cualquier causa (2,8 % vs. 5,5 %; hazard ratio [HR] 0,49; IC 95 %, 0,15-1,63). El índice de efectos adversos graves no se diferenció significativamente entre los grupos con tofacitinib y placebo (14,1 % vs. 12 %).
Conclusiones: Los autores concluyeron que en los pacientes en estado moderado hospitalizados con neumonía por COVID-19, el uso de tofacitinib estuvo asociado a un menor riesgo de muerte o insuficiencia respiratoria.
Comentario de los editores de McMaster: Otro ensayo aleatorizado evaluó la eficacia del baricitinib en combinación con remdesivir en pacientes con neumonía por COVID-19 que estaban recibiendo oxigenoterapia nasal de alto flujo (doi: 10.1056/NEJMoa2031994). En ese estudio, se observó una mejoría en el tiempo de recuperación de los pacientes con oxigenoterapia nasal de alto flujo o ventilación no invasiva que recibieron baricitinib y remdesivir (de 18 a 10 días de media) en comparación con los que solo recibieron remdesivir, pero en la población total del estudio no se produjo una reducción significativa en la mortalidad (5,1 % vs. 7,8 %). Si se analizan en conjunto, estos estudios subrayan la importancia de la selección de pacientes al considerar opciones de tratamiento para la neumonía por COVID-19, ya que podría haber un "punto óptimo" durante el curso clínico de la COVID-19 en el que los inhibidores de JAK tienen más probabilidades de ofrecer beneficios. No obstante, también se debe considerar el alto coste de estos fármacos (>2000 USD por 2 semanas de tratamiento).