Análisis de los factores de riesgo asociados al desarrollo de secuelas de la COVID-19

Siglas y abreviaturas: CMV — citomegalovirus, COVID-19 (coronavirus disease 2019) — enfermedad por coronavirus de 2019, VEB — virus de Epstein-Barr, PASC (post-acute sequelae of COVID-19) — secuelas posagudas de la COVID-19, SARS-CoV-2 (severe acute respiratory syndrome coronavirus 2) — coronavirus 2 del síndrome respiratorio agudo grave

Introducción: se estima que aproximadamente un 31-69 % de los pacientes presentan secuelas (PASC, post-acute sequelae of COVID-19) o COVID-19 persistente después de desarrollar una infección por SARS-CoV-2. Las PASC pueden incluir pérdida de memoria, trastornos gastrointestinales, fatiga, anosmia y disnea. Sin embargo, no se conocen del todo bien los factores de riesgo asociados al desarrollo de las PASC ni sus relaciones biológicas e inmunológicas. Según los estudios, el desarrollo de estos síntomas puede guardar relación con la gravedad de la fase aguda de la infección por SARS-CoV-2, factores autoinmunes y la presencia de fragmentos del virus en el organismo.

Objetivo del trabajo: el objetivo de este estudio era determinar los factores asociados al desarrollo de secuelas de la COVID-19.

Métodos: se llevó a cabo un estudio longitudinal con la participación de 309 pacientes con COVID-19. La observación comenzó desde el diagnóstico de la infección por SARS-CoV-2 hasta la recuperación (2-3 meses después de enfermar). Se analizaron los datos clínicos y los síntomas referidos por los pacientes. Además, se realizó un análisis multiómico del perfil de los pacientes con COVID-19, se determinaron los niveles de viremia del SARS-CoV-2, el CMV y el EBV, y se examinó la presencia de autoanticuerpos (anti-IFN-α2 y cinco autoanticuerpos antinucleares (AAN): Ro/SSA, La/SS-B, U1-snRNP, Jo-1 y P1.

Resultados: los investigadores identificaron cuatro factores de riesgo asociados al desarrollo de PASC en el momento del diagnóstico de la COVID-19: diabetes tipo 2, nivel de viremia del SARS-CoV-2 y el VEB y presencia de autoanticuerpos específicos. Además, los pacientes con síntomas gastrointestinales de PASC presentaron una dinámica significativa de linfocitos T CD8+ específicos del SARS-CoV-2 y el CMV durante el período de recuperación después de la COVID-19. Asimismo, se observó que las polarizaciones inmunológicas estuvieron asociadas de forma independiente a los factores de riesgo víricos y relacionados con autoanticuerpos de desarrollar PASC. Se demostró que las interdependencias entre los factores asociados al desarrollo de PASC disminuyeron con el tiempo. Limitaciones del estudio: grupo de estudio reducido. Además, el período de observación de los pacientes con COVID-19 fue de tan solo 2-3 meses, por lo que fue imposible determinar cuántos pacientes desarrollaron secuelas a largo plazo.

Resumen: la presencia de autoanticuerpos, el nivel de viremia del SARS-CoV-2, las enfermedades concomitantes y la reactivación de una infección latente por EBV pueden guardar relación con el desarrollo de secuelas de la COVID-19. Los resultados presentados por los investigadores sugieren que es posible controlar los factores de riesgo de PASC en la etapa inicial de la infección por SARS-CoV-2, lo que puede permitir prever el desarrollo de secuelas de la COVID-19. Es necesario realizar más estudios con grupos más amplios para entender los mecanismos y los factores de riesgo de las PASC, así como elaborar estrategias de tratamiento y prevención.