Los resultados del estudio EMPA-REG OUTCOME, que han sido publicados en los últimos años, demuestran que el uso de empagliflozina en pacientes con diabetes mellitus tipo 2 y con una enfermedad cardiovascular concomitante, disminuye el riesgo de muerte en aprox. un 38 %, independientemente de la presencia de la insuficiencia cardíaca. El objetivo del nuevo análisis de los datos del estudio EMPA-REG OUTCOME fue la evaluación de la influencia de la empagliflozina en el riesgo de aparición de descompensaciones de la insuficiencia cardíaca, o de muerte por causas cardiovasculares. Para evaluar el riesgo inicial de desarrollar una insuficiencia cardíaca se utilizó la escala Health ABC HF, que abordó factores de riesgo tales como la edad, la frecuencia cardíaca, la glucemia, la cardiopatía isquémica, el tabaquismo, la concentración de creatinina, la presencia de signos de hipertrofia ventricular izquierda en el ECG, la concentración de albúmina y la hipertensión arterial.
En el grupo de pacientes con riesgo bajo para el desarrollo de insuficiencia cardíaca, la administración de empagliflozina redujo el riesgo de la exacerbación de la insuficiencia cardíaca o de muerte por causas cardiovasculares cerca del 30 %. En cambio en el grupo de pacientes con riesgo alto se evidenció una disminución en un 45 % del riesgo de aparición de este punto final, en comparación con el grupo de control. En pacientes con insuficiencia cardíaca presente al inicio se observó la disminución en más del 25 % del riesgo de exacerbación de la insuficiencia cardíaca y de la muerte por causas cardiovasculares.
Por lo tanto, los autores del estudio subrayan que la empagliflozina permite mejorar el pronóstico de los pacientes con diabetes mellitus tipo 2 y enfermedad cardiovascular, independientemente del riesgo inicial de desarrollar insuficiencia cardíaca. Sin embargo, caber anotar que todavía no está claro si los resultados obtenidos se deben a las propiedades diuréticas de los inhibidores del SGLT2 o, quizás, a otras propiedades cardioprotectoras.