El congreso de la European Society for Medical Oncology (ESMO) se celebró en Barcelona entre el 27 de septiembre y el 1 de octubre de 2019. En el congreso participaron más de 28 000 oncólogos de todo el mundo. Durante el encuentro se dedicó una sesión entera al tema de las vacunas contra el VPH.
A escala mundial la infección viral es la causa de un 10 % de todas las neoplasias. La mayoría de estos casos se relaciona con infección por uno de los siguientes virus: VPH (600 000 nuevas incidencias de neoplasias malignas al ano), virus de la hepatitis B (380 000) y C (220 000) y virus de Epstein-Barr (110 000).
Desde luego, la neoplasia más común relacionada con la infección por el VPH es el cáncer cervical (a escala mundial son más de 500 000 incidencias y más de 250 000 muertes al año), pero las neoplasias relacionadas con la infección por el VPH ocurren tanto en mujeres, como en hombres. En la actualidad se estima que tienen relación con la infección por VPH: un 99 % de los casos de cáncer cervical, un 60 % de los casos de cáncer oral y de faringe, un 91 % de los casos de cáncer de ano, un 75 % de los casos de cáncer vaginal, un 69 % de los casos de cáncer vulvar y un 63 % de los casos de cáncer de pene.
Según el profesor Jacek Cuzick de Londres, las vacunaciones generalizadas contra el VPH deben realizarse no solo en las niñas de 12-14 años, sino también en las niñas mayores y en niños.
El profesor Cuzick subrayó que las vacunaciones influyen de manera positiva en la reducción no solo de los casos de cáncer cervical, sino también de las verrugas genitales (genital warts), dependientes de los VPH tipo 6 y 11. En cuanto a estas últimas, se calcula que anualmente se descubren 17,3 millones de nuevos casos en hombres y 14,4 millones en mujeres.
A modo de comparación: el número total de nuevos casos de cáncer cervical supera levemente los 0,5 millones al año y el número de todos los casos de neoplasias relacionadas con el VPH no supera los 0,6 millones al año (incluidos los casos de cáncer cervical).
El profesor Cuzik dio como ejemplo el caso de Gran Bretaña, donde desde hace un tiempo se vacunan casi el 90 % de niñas y ya se ha observado la reducción de infecciones por VPH. Según el experto, la ampliación de los programas en niños de 12-14 años permitirá reducir no solo la cantidad de los casos de verrugas genitales, sino también de las demás neoplasias relacionadas con el VPH, como el cáncer de nasofaringe.
Como observó en su ponencia, en algunos países los niños ya reciben vacunas. El experto subrayó también que hay premisas sobre la administración de las vacunas en mujeres de más edad, puesto que existen datos científicos que indican los beneficios de tal procedimiento, por ejemplo, en relación con la eficacia del sistema inmunológico en la erradicación de nuevas infecciones por VPH.