Cómo citar: Mejza F., Postępowanie w kaszlu u chorych na ostre zapalenie oskrzeli. Podsumowanie wytycznych CHEST 2020, Med. Prakt., 2020, 12: 41-46
Siglas y abreviaturas: EPOC — enfermedad pulmonar obstructiva crónica, PEF — cúspide del flujo espiratorio máximo
Introducción
En el documento que nos ocupa, la bronquitis aguda se define como una enfermedad aguda de las vías respiratorias bajas que se manifiesta principalmente mediante tos (con o sin expectoración de esputo), dura ≤3 semanas, no presenta signos clínicos ni radiológicos de neumonía (frecuencia del ritmo cardíaco ≥100/min, frecuencia respiratoria ≥30/min, temperatura bucal ≥37,8 °C, anomalías en la auscultación torácica, alteraciones radiológicas típicas de la neumonía) y cuyos síntomas no responden a otras causas (p. ej. sinusitis, exacerbación de una enfermedad crónica de las vías respiratorias inferiores como asma, bronquiectasia o enfermedad pulmonar obstructiva crónica [EPOC]).
La enfermedad está causada por inflamaciones en la tráquea y las vías respiratorias inferiores. La bronquitis aguda ocupa una parte significativa de las citas con médicos de atención primaria y neumólogos. El diagnóstico de bronquitis aguda solo se puede establecer cuando no haya datos clínicos que apunten a una neumonía, un resfriado, una exacerbación del asma o EPOC. En el diagnóstico diferencial, se debe considerar una enfermedad crónica de las vías respiratorias inferiores, inclusive en los pacientes en los que no se hubiera diagnosticado dicha enfermedad previamente. Se ha constatado que aproximadamente 1/3 de los pacientes con bronquitis aguda desarrollan asma o bronquitis crónica en los 3 años siguientes. Para establecer el diagnóstico acertado, es fundamental elaborar un historial que incluya información sobre las enfermedades actuales, los antecedentes de episodios similares y la exposición a los factores perjudiciales, tabaco incluido. Aunque la enfermedad tenga un carácter autolimitado, en la mayoría de países los médicos con frecuencia de forma innecesaria administran antibióticos y otros fármacos.
Metodología
El documento ha sido elaborado por un grupo de trabajo designado por el American College of Chest Physicians (CHEST). Se comenzó por formular las preguntas clínicas en formato PICO (paciente, intervención de interés, intervención de comparación y resultados). Se formularon dos preguntas sobre el manejo diagnóstico (la conveniencia de realizar distintas exploraciones complementarias) y terapéutico (eficacia y seguridad de distintos fármacos) en los pacientes adultos sin inmunodeficiencias con tratamiento ambulatorio para la tos asociada a una bronquitis aguda sospechada, sobre la base de los datos de la anamnesis y la exploración física.
Para responder a estas preguntas, se llevó a cabo una revisión bibliográfica sistemática. Como no se encontraron datos de calidad suficiente, las recomendaciones se formularon principalmente sobre la base de la opinión de los expertos, por lo que son recomendaciones débiles.
Recomendaciones
1. Se sugiere no realizar las siguientes exploraciones complementarias de forma habitual:
1) radiografía de tórax
2) espirometría
3) mediciones del PEF
4) cultivo de esputo
5) PCR de muestras de las vías respiratorias para detectar virus
6) determinación de proteína C-reactiva o procalcitonina en suero.
2. Si la tos persiste o se intensifica, se sugiere volver a examinar al paciente y considerar la realización de pruebas dirigidas a las causas potenciales de la tos en función de la situación clínica: radiografía de tórax, cultivo de esputo, hemograma de sangre periférica con fórmula leucocitaria, determinación de los marcadores de inflamación (p. ej. proteína C-reactiva).
3. Se sugiere no administrar de forma habitual:
1) antibióticos
2) antivirales
3) antitusígenos
4) β2 miméticos inhalados
5) anticolinérgicos inhalados
6) glucocorticoides inhalados ni orales
7) antinflamatorios no esteroideos
8) otros fármacos,
hasta que se demuestre la seguridad y la eficacia a la hora de reducir la intensidad o acelerar la remisión de la tos.
4. Se sugiere considerar un tratamiento antibiótico en los pacientes cuyos síntomas de bronquitis aguda empeoren si el médico considera que la infección bacteriana es probable.