Estrategias restrictivas vs. liberales de transfusión en pacientes con anemia e IAM

En los últimos años se ha otorgado especial atención a la identificación de umbrales de transfusión clínicamente significativos para los pacientes hospitalizados o críticos con anemia. Durante muchos años, este umbral ha sido un nivel de hemoglobina (Hb) de <100 g/l. Sobre la base de varios ensayos aleatorizados bien diseñados, un umbral de transfusión de 70 g/l (nivel diana 70-90 g/l) es apropiado en pacientes críticos sin sangrado (en el entorno de cuidados intensivos); un umbral de 80 g/l es apropiado en pacientes recién operados sometidos a cirugía no cardíaca, sobre todo los con enfermedad coronaria preexistente; y un umbral de 75 g/l es apropiado en pacientes sometidos a cirugía de injerto de derivación coronaria.

El presente estudio comparó una estrategia restrictiva vs. liberal de transfusión en pacientes con anemia e infarto de miocardio (IM) agudo. El criterio de valoración principal incluyó la aparición de eventos adversos cardiovasculares mayores (MACE) a los 30 días: un compuesto de muerte por cualquier causa, ACV, IM recurrente o revascularización de emergencia por isquemia.

Los pacientes con IM y un nivel de Hb de 70-100 g/l fueron asignados de manera aleatoria a recibir una estrategia restrictiva (transfundir si Hb ≤80 g/l) o liberal (transfundir si Hb ≤100 g/l) de transfusión. Se examinaron 668 pacientes (edad promedio de 77 años; 57,8 % hombres): 342 en el grupo de estrategia restrictiva (342 unidades trasfundidas de concentrado de hematíes) y 324 en el grupo liberal de transfusión (758 unidades trasfundidas). Los MACE ocurrieron en el 11,0 % (IC 95 %, 7,5-14,6) de los pacientes del grupo restrictivo y en el 14,0 % (IC 95 %, 10,0-17,9) de los pacientes del grupo liberal (diferencia, –3,0 % [IC 95 %, –8,4-2,4]), por lo cual se ha cumplido el criterio de no inferioridad previamente establecido. No hubo ninguna diferencia estadísticamente significativa entre el grupo restrictivo y liberal en cuanto a los criterios de valoración de mortalidad por cualquier causa (5,6 % vs. 7,7 %), IM recurrente (2,1 % vs. 3,1 %) y revascularización de emergencia debida a la isquemia coronaria (1,5 % vs. 1,9 %), pero el estudio no tenía la potencia para evaluar el efecto de una estrategia restrictiva de transfusión sobre los criterios de valoración mencionados y todas las estimaciones puntuales se mostraron a favor de una estrategia restrictiva.

Los autores concluyeron que en pacientes con IM agudo y anemia, una estrategia restrictiva de transfusión no era inferior a una estrategia liberal para el criterio de valoración de MACE. Los hallazgos provenientes de este estudio son coherentes con las tendencias a limitar la transfusión en anemia en otros ámbitos clínicos. Un enfoque restrictivo de transfusión en pacientes con anemia es importante como medio de la conservación de los productos sanguíneos y puede proporcionar beneficio clínico neto para los criterios de valoración clínicamente relevantes. Sin embargo, un umbral de transfusión sirve como guía general y puede no ser aplicable a pacientes individuales, incluyendo los con sangrado activo, ambulatorios y asintomáticos, o paliativos.