Ketamina: ¿una nueva opción para la depresión resistente al tratamiento?

Bibliografía

Anand A, Mathew SJ, Sanacora G, et al. Ketamine versus ECT for Nonpsychotic Treatment-Resistant Major Depression. N Engl J Med. 2023 Jun 22;388(25):2315-2325. doi: 10.1056/NEJMoa2302399. Epub 2023 May 24. PMID: 37224232.

Contexto

El manejo de la depresión resistente al tratamiento, definida como el fracaso de 2 antidepresivos utilizados de manera consecutiva durante un episodio depresivo, es problemático y puede incluir la terapia electroconvulsiva (TEC) tradicional o el mucho más novedoso uso de dosis bajas (no anestésicas) de ketamina (un sedante que puede utilizarse para anestesia general). La eficacia comparativa y el perfil de seguridad de estos 2 métodos no están claros.

Métodos

En este ensayo aleatorizado controlado participaron 403 personas de 21‑75 años diagnosticadas con depresión mayor al menos moderada y sin síntomas psicóticos. El uso de otros fármacos estaba permitido y era frecuente (antidepresivos típicos en la mayoría de los pacientes y, además, antipsicóticos atípicos [~30 %], benzodiazepinas [~30 %], antidepresivos atípicos [>40 %] y anticonvulsivos [>25 %]). Durante la fase activa de tratamiento, la TEC se administró 3 veces a la semana y la ketamina intravenosa se administró 2 veces a la semana a dosis de 0,5 mg/kg durante 40 min. Pasadas esas 3 semanas, los pacientes podían ser tratados según decidió su médico responsable.

El resultado principal, examinado al cabo de las 3 semanas de tratamiento, fue la respuesta al tratamiento de acuerdo con el Inventario Rápido de Sintomatología Depresiva: Autoevaluación (QIDS‑SR‑16; recurso que consta de 16 ítems, con puntuación de 0‑27; puntuación más alta indica depresión más grave), definida como una reducción en la puntuación de >50 %. Los resultados secundarios fueron la respuesta al tratamiento según la escala de evaluación de la depresión de Montgomery‑Åsberg (MADRS, intervalo, 0‑60; puntuación más alta indica depresión más grave) y la remisión (entendida como una puntuación ≤5 según el QIDS‑SR‑16 o ≤10 según la MADRS). También se utilizaron el test de memoria y los cuestionarios de calidad de vida.

Resultados

La respuesta al tratamiento a las 3 semanas según el QIDS‑SR‑16 ocurrió en el 55 % de los pacientes del grupo de ketamina y el 41 % del grupo de TEC (una diferencia de ~14 puntos porcentuales; IC 95 %, 4‑24 puntos porcentuales). La respuesta según la MADRS ocurrió en el 51 % de los pacientes del grupo de ketamina y el 41 % del grupo de TEC. La remisión según el QIDS‑SR‑16 se notificó en el 32 % de los pacientes del grupo de ketamina y en el 20 % de los pacientes del grupo de TEC y los números correspondientes para la MADRS fueron del 38 % y el 22 %. Los problemas de la memoria y de la cognición fueron relativamente más pronunciados en el grupo de TEC. Los síntomas disociativos afectaron a los pacientes del grupo de ketamina durante la mayoría de los días de tratamiento.

Conclusiones

Los autores concluyeron que la ketamina tiene efectos por lo menos comparables con la TEC en la depresión resistente al tratamiento.

Comentario de los editores de McMaster

La frecuencia de los episodios depresivos junto con la eficacia limitada de la mayoría de los métodos comúnmente utilizados hacen que la depresión resistente al tratamiento sea un problema importante. La gravedad de esta enfermedad y las consecuencias para los pacientes y su entorno hacen que haya un gran interés en la disponibilidad de alternativas, lo cual provoca el auge en su uso. Se están volviendo más baratos los métodos de administración más seguros, que permiten acceso más fácil y menos vigilancia (p. ej. administración intranasal).

En estas 2 consecutivas Publicaciones de la semana, presentaremos los datos de 2 alternativas: en este artículo, de la ketamina y en el otro, del alucinógeno psilocibina.