Los pulmones constituyen una de las localizaciones más frecuentes de metástasis a distancia, sobre todo de: cáncer colorrectal, cáncer de mama, cáncer renal, neoplasias de cabeza y cuello, melanoma, neoplasias testiculares, osteosarcoma y sarcoma.
Síntomas: las metástasis de pequeño tamaño son asintomáticas. Con la progresión de la enfermedad pueden aparecer dolor torácico, disnea y hemoptisis debida al crecimiento del tumor o a sus complicaciones (obstrucción del bronquio, atelectasia, neumonía).
Diagnóstico: las metástasis pulmonares se diagnostican con mayor frecuencia mediante una radiografía de tórax, pero el método diagnóstico básico es la TC. La imagen radiológica es muy variable, pudiendo observarse desde opacidades redondeadas únicas o múltiples, pequeñas lesiones diseminadas tipo “linfangiosis pulmonar”, áreas de atelectasia, adenopatías hiliares o mediastínicas, derrame pleural. En la mayoría de los casos la imagen radiológica junto con el diagnóstico de la enfermedad neoplásica de otro órgano permite diagnosticar metástasis sin la necesidad de verificación histológica. En caso de dudas debe realizarse una biopsia (percutánea o transbronquial). En casos dudosos puede ser útil la determinación de marcadores tumorales circulantes.
Diagnóstico diferencial: foco de neoplasia pulmonar primaria, neoplasias benignas, tuberculosis, absceso pulmonar, lesiones fúngicas, teratoma, hamartoma.
Tratamiento: la resección de la metástasis única con un margen de parénquima pulmonar sano puede estar justificada, sobre todo después de un tiempo largo desde la curación del foco primario, en enfermos con cáncer renal, cáncer de tiroides, cáncer colorrectal, osteosarcoma o sarcoma, sin tumor primario ni diseminación a otros órganos. La radioterapia es el método de tratamiento paliativo de elección en los enfermos con sangrado, disnea o dolor en el curso de metástasis pulmonares. En caso de número limitado de metástasis, la radioterapia estereotáctica es una alternativa al tratamiento quirúrgico. En enfermos con numerosas metástasis pulmonares y en las neoplasias con gran sensibilidad a la quimioterapia se utiliza en general la quimioterapia específica para la neoplasia particular; en algunas neoplasias, p. ej. en linfomas, coriocarcinoma y neoplasias testiculares, se puede lograr una curación permanente. Se utilizan los fármacos moleculares seleccionados según el tipo de neoplasia primaria y las características predictivas del tumor (p. ej. fármacos anti-HER2 en cáncer de mama HER2 positivo, inhibidores de la cinasa mTOR, p. ej. en cáncer renal, inhibidores de BRAF y MEK en el melanoma) y la inmunoterapia: anticuerpos que bloquean el antígeno CTLA-4 (ipilimumab) o el eje PD-1/PD-L1 (nivolumab, pembrolizumab, atezolizumab, durvalumab).