Transmisión del SARS-CoV-2 a través de superficies contaminadas en interiores - página 2

Eficacia de limpiar y desinfectar superficies para prevenir infecciones por SARS-CoV-2

Limpiar las superficies con jabón u otro detergente y desinfectarlas con un producto que inactive el SARS-CoV-2 permite reducir el riesgo de transmisión indirecta. La eficacia de estas medidas depende del tipo de producto, el procedimiento y la minuciosidad de la limpieza. Hasta la fecha no se ha evaluado la efectividad de limpiar superficies lisas con un jabón o detergente que no contenga ninguna sustancia desinfectante de las incluidas en la lista oficial de la Agencia de Protección Ambiental de Estados Unidos (EPA). Gracias a los estudios con otros patógenos, sabemos que el resultado de la limpieza depende principalmente del procedimiento y el tipo de superficie. Además de eliminar físicamente las partículas del virus, limpiar las superficies sirve para degradar el SARS-CoV-2, ya que los productos de limpieza deterioran la envoltura vírica.

Para inactivar el SARS-CoV-2 con eficacia en las superficies, el producto desinfectante debe encontrarse en la lista N de la EPA.² En función de su composición, algunos desinfectantes también se pueden usar para limpiar. Todos los productos de limpieza y desinfección se deben utilizar de acuerdo con el folleto informativo de su fabricante. Desde el principio de la pandemia de COVID-19, el número de intoxicaciones y lesiones cutáneas a causa del uso inadecuado de estas sustancias ha aumentado. (...)

Desinfectar las superficies contribuye a limitar la transmisión secundaria del virus entre un paciente infectado y sus convivientes. Sin embargo, no hay muchas pruebas de que usar desinfectantes de forma rutinaria fuera de los centros médicos —tanto en interiores como en exteriores— sea eficaz como medida de prevención de las infecciones por contacto con superficies y objetos. Lo que sí sabemos es que, en principio, el riesgo de infección por esta vía es bajo. Limpiar las superficies con jabón u otro detergente al menos una vez al día permite reducir significativamente la cantidad de virus. Cuando en un espacio cerrado no haya ninguna persona con sospecha de infección por SARS-CoV-2 o con COVID-19, basta con limpiar los objetos que se toquen con frecuencia con jabón u otro detergente. Si una de estas personas ha estado en dicho local en las últimas 24 horas, la presencia de virus en los objetos es más probable, por lo que se deben desinfectar, sobre todo si se usan o se tocan con frecuencia.

Procedimiento cuando una persona con COVID-19 haya estado en un espacio cerrado

Cuando una persona con sospecha o diagnóstico de COVID-19 ha estado en un espacio cerrado, el virus puede mantenerse en el aire durante minutos u horas dependiendo de la carga viral de las secreciones respiratorias del enfermo, la circulación de aire, la ventilación, la temperatura y la humedad. Llevar mascarillas de forma continua y adecuada reduce significativamente la cantidad de virus en el local, incluidas sus superficies.

Según los datos limitados obtenidos en análisis epidemiológicos y estudios experimentales, el riesgo de infección por contacto indirecto en un local en el que haya estado una persona con COVID-19 es bajo después de 24 horas. En las primeras 24 horas, el riesgo se puede reducir ventilando el local, retrasando por lo menos varias horas la entrada de otras personas (debido a los casos documentados de transmisión aérea) y utilizando medidas de protección personal. Los CDC subrayan la importancia de emplear métodos que aumenten la eficacia de las mascarillas para prevenir las infecciones por SARS-CoV-2.

Resumen

Las infecciones por SARS-CoV-2 se pueden transmitir por contacto con una superficie contaminada. Sin embargo, según los expertos de los CDC, los datos disponibles indican que el riesgo de infección por esta vía es bajo. En la mayoría de situaciones, este riesgo se reduce lo suficiente tras limpiar la superficie con jabón u otro detergente. Fuera de los centros médicos, se recomienda desinfectar los espacios cerrados si una persona con COVID-19 o sospecha de infección por SARS-CoV-2 ha estado en ellos en las últimas 24 horas. El riesgo de transmisión por contacto indirecto se puede reducir llevando mascarillas de forma continuada y correcta y lavándose las manos.