Calidad de los probióticos
La mayoría de productos disponibles en la actualidad poseen el estatus de suplementos dietéticos, y no de fármacos. Por desgracia, varios controles han revelado discrepancias frecuentes y considerables entre el contenido declarado y el real. Muchas organizaciones, entre las que se incluye la ESPGHAN,33 abogan por un control más estricto de la producción de probióticos. Se debe prestar especial atención a que se cumplan las buenas prácticas actuales relativas a la fabricación de productos para bebés prematuros. Mientras no se elaboren mecanismos de control independiente, hay que intentar que los fabricantes presenten los certificados de calidad pertinentes de cada producto (identidad de la cepa, pureza, durabilidad y perfil de sensibilidad y resistencia a los antibióticos).10