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Sugerencias adicionales de los expertos
Los datos bibliográficos señalan inequívocamente que la realización de la ecografía por un médico capacitado a la cabecera del paciente es preferible al transporte del paciente a un centro de radiología para realizar la prueba. El clínico posee los datos del historial y de la exploración física, así como los conocimientos necesarios sobre el estado actual del paciente, lo cual influye en el acierto del diagnóstico final.
Al examinar a un paciente en estado clínico estable, se recomienda utilizar sondas convexas (también microconvexas o sectoriales) y lineales. Se debe examinar al paciente en posición sentada o tumbada. La excepción son los pacientes con posición forzada u ortopnea, a quienes se examina únicamente en posición sentada o semisentada. La prueba a la cabecera del paciente está especialmente recomendada en los pacientes clínicamente inestables con disnea. La técnica de la ecografía pulmonar depende del estado general del paciente. Siempre se debe examinar la mayor área pulmonar posible.
La ecografía pulmonar realizada por un médico capacitado en un paciente con insuficiencia respiratoria es una herramienta buena y segura para el diagnóstico diferencial de enfermedades pulmonares.
Se recomienda que los médicos especializados en enfermedades internas, cardiología, neumología y nefrología reciban una capacitación básica sobre las aplicaciones teóricas y prácticas de la ecografía pulmonar. El programa de formación básico de los médicos durante su especialización debe abarcar el diagnóstico de derrame pleural, neumotórax, edema pulmonar cardiogénico y no cardiogénico, enfermedad pulmonar intersticial (fibrosis pulmonar incluida), neumonía, atelectasia, embolismo pulmonar, lesiones tumorales subpleurales y fracturas de costillas, así como los modos de utilizar la ecografía durante procedimientos diagnóstico y tratamientos invasivos. Asimismo, se recomienda introducir una formación básica en ecografía en las facultades de medicina.
