Hemoptisis

La hemoptisis es la expectoración de sangre o de esputo sanguinolento procedente de las vías respiratorias. La hemoptisis puede deberse a varias causas. Las más frecuentes incluyen enfermedades pulmonares y bronquiales (bronquitis, neumonía, bronquiectasias, cáncer de pulmón, tuberculosis). El esputo sanguinolento no siempre procede de las vías respiratorias bajas. La hemoptisis puede deberse al cáncer de pulmón, por lo que es una manifestación que no debe descuidarse.

La sangre expectorada suele proceder de vasos bronquiales. La hemoptisis es un signo preocupante, que requiere consulta médica. A veces el paciente tiene dificultades para establecer si la sangre expectorada procede de las vías respiratorias bajas, de la boca, nariz o del tracto digestivo (p. ej. vómito de sangre). Hay que recordar que la hemoptisis puede deberse al cáncer de pulmón, por lo que requiere un diagnóstico.

Pseudohemoptisis

La pseudohemoptisis es la expectoración de sangre procedente de la boca o de la nasofaringe (la secreción nasal sanguinolenta puede pasar a la garganta).

Causas de la hemoptisis

La hemoptisis puede deberse a varias causas, por lo que es necesario consultar al médico para que pueda realizar un procedimiento diagnóstico adecuado.

Causas frecuentes de hemoptisis

• bronquitis o neumonía (puede presentarse tos con sangre)
• bronquiectasias (abundante expectoración con sangre)
• cáncer de pulmón (por esta razón, la hemoptisis que se presenta sin otras manifestaciones respiratorias siempre requiere una consulta médica)
• tuberculosis.

Causas moderadamente frecuentes de hemoptisis

• embolismo pulmonar (con frecuencia se acompaña de disnea de inicio súbito y de dolor torácico)
• insuficiencia cardíaca
• traumatismos pulmonares, también producidos por tratamientos médicos (p. ej. posteriores a procedimientos, como broncoscopia o biopsia pulmonar)
• neoplasias pulmonares distintas al cáncer.

Causas raras de hemoptisis

• aspergilosis
• trastornos de la coagulación
• estenosis mitral
• infecciones por algunos parásitos
• hipertensión pulmonar
• vasculitis y enfermedades del tejido conectivo (enfermedad de Goodpasture, lupus eritematoso sistémico, granulomatosis de Wegener)
• fármacos: anticoagulantes, fibrinolíticos, ácido acetilsalicílico
• uso de cocaína
• cuerpo extraño en las vías respiratorias
• hemosiderosis pulmonar idiopática
• amiloidosis.

Hemoptisis: diagnóstico

Durante la consulta, el médico preguntará sobre la cantidad y el tipo de expectoración (purulenta, sanguinolenta, rosada, espumosa, expectoración de sangre sola), así como las circunstancias de la hemoptisis. Otra información de importancia es la presencia del hábito tabáquico y de otras manifestaciones (p. ej. fiebre, pérdida de peso) o enfermedades crónicas (p. ej. trastornos de la coagulación, hipertensión pulmonar). A continuación, el médico realizará la exploración física. En función de la causa sospechada de hemoptisis, el médico indicará realizar exploraciones adicionales, p. ej. radiografía del tórax (en algunos casos también tomografía computarizada), pruebas de laboratorio, análisis de sangre (hemograma, pruebas de coagulación) y a veces también broncoscopia. En algunos casos el médico puede derivar al paciente a una consulta otorrinolaringológica, si sospecha que la hemoptisis procede de las vías respiratorias altas.

Actuación en caso de hemoptisis

En caso de hemoptisis siempre es necesario consultar a un médico. Se debe llamar urgentemente a una ambulancia en caso de:

• expectoración de grandes cantidades de sangre
• hemoptisis acompañada de disnea y/o dolor torácico súbito.