Medición de la presión transcutánea de oxígeno

Para medir la presión transcutánea de oxígeno (TcPO2), se utiliza el electrodo polarográfico de tipo Clark modificado. El resultado de la medición es el resultado del flujo sanguíneo cutáneo, actividad metabólica, disociación de la oxihemoglobina y de la presión parcial del oxígeno en los tejidos. El método permite evaluar indirectamente la perfusión cutánea y determinar el grado de la isquemia de una extremidad. La medición se puede tomar en cualquier parte de la piel de todo el cuerpo sin la necesidad de una preparación previa del paciente. La gama de los valores normales es muy amplia, por lo cual a las personas con enfermedades pulmonares e insuficiencia cardíaca se les recomienda hacer mediciones de referencia en el área supra- y subclavicular. Los valores óptimos son habitualmente de ~50 mm Hg. En una isquemia crítica de las extremidades inferiores los valores de la TcPO2 <20 mm Hg indican un pronóstico desfavorable. El protocolo del estudio no es muy complejo y no requiere mucha experiencia de la persona que realiza el examen, por lo tanto, lo puede dirigir un personal sanitario intermedio.