Soplos continuos (en maquinaria)

Mecanismo de aparición: se forman a consecuencia de cortocircuitos de alta o baja presión causados por comunicaciones arterioarteriales anormales o fístulas arteriovenosas. Se escuchan durante todo el ciclo cardíaco, sin un intervalo perceptible entre la sístole y la diástole. Empiezan en la fase de la sístole, generalmente llegan a la máxima intensidad cerca del II tono y persisten durante todo el período de la diástole o durante una parte de este.

Causas:

1) conducto arterioso persistente: si se desarrolla la hipertensión pulmonar, puede quedarse solo el soplo sistólico

2) ventana aortopulmonar

3) ruptura de aneurisma del seno de Valsalva hacia el ventrículo derecho

4) fístulas de las arterias pulmonares

5) origen de la arteria coronaria en la arteria pulmonar

6) malformaciones arteriovenosas (más frecuentemente en los pulmones).

Otro soplo constante es un zumbido venoso inocente, a menudo audible en niños y adultos jóvenes (más frecuentemente en embarazadas) o en estados con circulación hipercinética. El mecanismo del soplo es poco claro; probablemente se produce una compresión de la vena yugular interna por la apófisis transversa del atlas, habitualmente al mover la cabeza.