Angiografía por resonancia magnética (angio-RMN)

ing. magnetic resonance angiography (MRA)

La angiografía por RMN (angio-RMN) define un conjunto de técnicas especiales de la resonancia magnética que sirven para la visualización no invasiva de los vasos. Las principales técnicas son:

1) angiografía por tiempo de vuelo (time of flight, TOF): utiliza la diferencia de intensidad de señal del tejido estático y de la sangre en su trayecto

2) angiografía por contraste de fase (phase contrast, PC): utiliza el  fenómeno de interacción entre la sangre que fluye y un tipo de gradiente magnético especial.

IndicacionesArriba

→cap. I.B.4.2.2.3.

ContraindicacionesArriba

→cap. I.B.4.4.

ResultadosArriba

1. Imágenes dependientes de T2

En una RMN rutinaria en la secuencia de eco de espín (imágenes dependientes de T2) la sangre en los vasos tiene una intensidad de señal baja (imagen de sangre negra), lo que permite realizar una evaluación orientativa de la topografía y permeabilidad de los vasos sin que sea posible diferenciarlos en arteriales y venosos.

La sangre que circula también puede visualizarse como sangre negra mediante la técnica de presaturación, la cual consiste en utilizar  impulsos electromagnéticos adicionales para saturar los protones de los tejidos adyacentes al vaso examinado. La presaturación únicamente de los vasos arteriales o  de los venosos permite su diferenciación. La eliminación de la señal de la sangre circulante facilita también la identificación de alteraciones trombóticas en los vasos.

2. Angiografía por tiempo de vuelo (TOF)

En las imágenes obtenidas en la secuencia eco de gradiente la sangre en los vasos se visualiza como áreas claras. La entrada de sangre nueva al volumen examinado, en el que consiguieron saturar los tejidos estacionarios, resulta en la emisión de una señal más fuerte (realce de señal dependiente del flujo) y la obtención de una imagen de sangre blanca. Esta imagen es claramente visible solo en el primer o en un par de primeros cortes, ya que los protones de la sangre circulante se saturan gradualmente durante su flujo a través del volumen estudiado.

La técnica TOF permite en el mismo tiempo reducir la intensidad de señal de los tejidos estacionares (fondo) y obtener una señal más fuerte de la sangre que fluye hacia el corte examinado. Los vasos pueden visualizarse en diferentes proyecciones, con mayor frecuencia se utiliza la de intensidad máxima de contraste. La técnica TOF tiene algunas limitaciones, p. ej. las dificultades en estudiar volúmenes grandes y en visualizar imágenes de flujo sanguíneo lento, la generación por los trombos en las imágenes dependientes de T1 de una señal fuerte que imita el flujo de sangre en el vaso, así como problemas con la valoración del flujo turbulento que se caracteriza por una señal más débil en comparación con el flujo laminar, lo cual puede conducir a un diagnóstico falso de la estenosis o a una sobreestimación del grado de estenosis.

La técnica TOF tiene una menor sensibilidad y especificidad en el diagnóstico de estenosis significativa de las arterias examinadas, en comparación con la angiografía por contraste de fase y la angio-RMN con refuerzo de contraste.

3. Angiografía por contraste de fase (PC)

La técnica PC permite obtener un mapa de flujo, en el que la intensidad de señal depende de la velocidad del flujo de espines en la dirección seleccionada, así como proporcionar datos cuantitativos sobre la velocidad del flujo sanguíneo. De las imágenes de partida se obtienen, con mayor frecuencia mediante la MIP, las reconstrucciones en las proyecciones espaciales seleccionadas.

La ventaja de la angiografía por contraste de fase es una supresión de tejidos estacionarios más fuerte y la obtención de imágenes de vasos con un contraste mejor que en el caso de angiografía por tiempo de vuelo. La variante tridimensional de este método permite obtener cortes de 1 mm de grosor que garantizan una resolución espacial alta. La técnica PC a diferencia de la TOF permite diferenciar el trombo de la sangre que fluye por el vaso, evaluar el tiempo de flujo y visualizar la sangre en movimiento lento. La desventaja de la técnica es la larga duración de la prueba.

4. Imágenes bidimensionales (2D) y tridimensionales (3D)

En función del tipo de geometría de la adquisición y reconstrucción de imagen, las técnicas de angio-RMN pueden dividirse en bidimensionales (2D) y tridimensionales (3D).

La angiografía 2D, basada en la adquisición de datos con aplicación de la geometría bidimensional, no difiere significativamente de otras técnicas de registro de imágenes por RMN. Su principal ventaja son tiempos cortos de adquisición de datos por capa, lo que permite examinar sobre todo los vasos del tórax y abdomen.

La angiografía 3D (de volumen), a diferencia del método 2D, utiliza un gradiente adicional que codifica la fase a lo largo del eje, lo que permite obtener cortes finos (<1 mm). Debido a la duración larga del estudio la secuencia de eco de espín en este caso no es práctica. En la angio-RMN resultarán aplicables solamente algunas variantes de secuencias de eco de gradiente cuya duración es de unos minutos. La técnica 3D se caracteriza también por una mejor resolución espacial. Tras la adquisición de datos, las imágenes se procesan según un algoritmo de proyección de intensidad máxima de contraste. En este método los puntos de máxima intensidad de señal de diversos cortes se proyectan en un plano: después de la sustracción se pueden ver únicamente las áreas hiperintensas correspondientes a los vasos y reconstruidas como una imagen 3D. Es posible evaluar la prueba en secuencias cine que permiten valorar la velocidad del flujo. La calidad de las imágenes angio-RMN obtenidas con los equipos de última generación es muy alta y permite visualizar los vasos periféricos, viscerales, intracerebrales e intracraneales.

5. Angiografía por RMN con refuerzo de contraste (contrast enhancement magnetic resonance angiography, CEMRA)

La prueba se realiza tras la administración iv. de un medio de contraste paramagnético, durante su primer paso por el vaso arterial examinado, en la secuencia tridimensional de eco de gradiente rápida. Con mayor frecuencia se administran los quelatos de gadolinio (Gd-DTPA) lo que lleva un amplificación significativa de la intensidad de señal en las imágenes dependientes de T1 (→fig. I.B.4-30).

La realización de una CEMRA requiere un aparato de RMN que disponga de gradientes fuertes con un tiempo de subida corto. Los equipos modernos permiten realizar la prueba en <30 s, durante un solo periodo de apnea, lo que limita considerablemente los artefactos por movimiento del paciente.

Las secuencias más recientes de la angio-RMN, tales como la angiografía multifase (multiphase MRA, time-resolved MRA) con tiempos de adquisición muy cortos (3-7 s), permiten realizar la prueba varias veces durante un solo período de apnea. De esta manera pueden obtenerse p. ej. las imágenes de los vasos renales en varias fases de refuerzo de contraste: arterial, venosa y parenquimatosa. En las reconstrucciones espaciales se opta por la fase óptima, la arterial, en la que el medio de contraste aún no llega a los vasos venosos. En los sistemas nuevos de RMN, tras administrar el medio de contraste, se instala también un programa de angio-RMN dinámica. El empleo de una secuencia adecuada permite revisar el relleno de las arterias con el medio de contraste (de manera similar a la angiografía convencional). La angio-RMN de las arterias coronarias (→fig. I.B.4-31) tiene una sensibilidad menor (60 % vs. 80-90 %) en la detección de estenosis que una TC multicorte (→cap. I.B.4.3).

El análisis de la prueba, al igual que en la TC, se basa en la evaluación de imágenes de partida y reconstrucciones espaciales multiplanares. La ventaja de la CEMRA respecto a las técnicas TOF y PC es su mejor resolución lineal y un tiempo de estudio más corto. La ventaja del método en comparación con la arteriografía convencional es su carácter no invasivo y el no uso de medios de contraste yodados. La ventaja respecto a la angio-TC es el hecho de no exponer al paciente a la radiación ionizante, además la frecuencia de aparición de complicaciones tras administrar un medio de contraste paramagnético es baja; la desventaja es una resolución espacial ligeramente peor.

6. Flebografía por RMN

Empleada en el diagnóstico de la enfermedad tromboembólica venosa. Al igual que en caso de la TC es posible realizar conjuntamente la flebografía por RMN (para visualizar la trombosis venosa profunda) y la angio-RMN (para visualizar el embolismo pulmonar). Estos estudios pueden realizarse en mujeres embarazadas.