Monitorización del resultado de la cirugía

Todos los pacientes tras una cirugía valvular requieren de una permanente monitorización cardiológica que permita una detección temprana del deterioro de la función de la prótesis o del ventrículo, o de una enfermedad progresiva de otra válvula cardíaca. Se debe realizar la evaluación clínica una vez al año e inmediatamente después de que se presenten nuevos síntomas y signos del sistema circulatorio. Los síntomas, al igual que la sospecha de complicaciones después del cambio de válvula, constituyen una indicación para realizar ecocardiografía transtorácica. Tras un implante de válvula biológica, transcatéter o quirúrgico, se debe realizar ecocardiografía con medición de los gradientes transvalvulares, inicialmente hasta 30 días después de la intervención (en caso de cirugía óptimamente ~30.º día), luego tras 1 año de la cirugía y posteriormente en intervalos de 1 año. Si la imagen ecocardiográfica transtorácica es de mala calidad o existe una sospecha de disfunción de la prótesis o de endocarditis, se debe considerar un examen transesofágico. La fluoroscopía (en enfermos con prótesis mecánica) y TC multidetector proporcionan una información útil en caso de la sospecha de trombosis valvular o la presencia de pannus como la causa de disfunción de la prótesis.

En caso de una disfunción de la prótesis, el enfermo precisa una reoperación. En algunos pacientes, debido a una violenta acumulación de los síntomas de insuficiencia cardíaca (incluido el shock cardiogénico), p. ej. en el curso de la obstrucción del disco de la prótesis mecánica, se debe considerar la posibilidad de una cirugía inmediata. Actuación en caso de sospecha de trombosis de la prótesis valvular cardíaca → fig. I.H.10-3.

Para eliminar los coágulos que obstruyen el disco de la prótesis en casos justificados, sobre todo cuando no hay posibilidad de operar inmediatamente o una cirugía supone un gran peligro, se puede considerar la administración de un fibrinolítico (al descartar las contraindicaciones).

La cirugía de pacientes en shock cardiogénico (por indicaciones vitales) da unos resultados considerablemente peores.

En caso de una degeneración progresiva de la bioprótesis, se puede realizar una cirugía programada de reemplazo valvular.