Oximetría de pulso (pulsioximetría)

Descripción de la pruebaArriba

La pulsioximetría es un método no invasivo de monitorización percutánea de la saturación de oxígeno de la hemoglobina en la sangre arterial (SpO2 [si es medida a través de gasometría, se utiliza el símbolo SaO2]) y de la frecuencia del pulso. Para este fin se utilizan dispositivos llamados pulsioxímetros (→fig. II.B.3-2), que funcionan mediante la espectrofotometría de transmisión que utiliza varias propiedades ópticas de la hemoglobina oxigenada y desoxigenada. Están equipados con sensores que se colocan en el dedo, lóbulo de la oreja, frente o alas de la nariz.

IndicacionesArriba

1) sospecha y monitorización del tratamiento de insuficiencia respiratoria

2) monitorización de la oxigenoterapia

3) monitorización del estado de enfermos graves

4) anestesia general y período inmediatamente posterior a la misma

ResultadosArriba

La SpO2 normal es de un 95-98 % (en personas >70 años: 94-98 %), y durante la oxigenoterapia puede alcanzar un 99-100 % (aunque en la mayoría de las situaciones clínicas no está indicado intentar alcanzar tales valores →cap. II.O.4).

Un resultado de SpO2 <90 % es claramente anormal y se corresponde con una PaO2 <60 mm Hg, lo que indica una insuficiencia respiratoria.

Las limitaciones más importantes de la pulsioximetría son las siguientes:

1) la medición se ve impedida o alterada por artefactos de movimiento y alteraciones del flujo sanguíneo periférico

2) aumento del resultado (SpO2) por efecto de la carboxihemoglobina, y en caso de valor real de <85 %, también por efecto de la metahemoglobina, que lo disminuye con valores >85 %

3) disminución del resultado (SpO2) por alteraciones en las uñas (micosis; esmalte oscuro que hay que quitar antes de la medición).