Laringitis

lat., ing. laryngitis

 

La laringitis es una inflamación de las cuerdas vocales y de los tejidos adyacentes. Se distinguen la laringitis aguda (<3 semanas) y crónica (>3 semanas).

Causas

1) de la laringitis aguda: infección (más frecuentemente viral), agentes irritantes (p. ej. humo de cigarrillo, alcohol, contaminación del aire atmosférico), uso excesivo de la voz

2) de la laringitis crónica: consecuencias de una laringitis aguda, agentes irritantes, reflujo gastroesofágico, granulomatosis con vasculitis.

Factores de riesgo: agentes irritantes, yatrogénicos (p. ej. glucocorticoides inhalados, intubación), alteraciones de la respiración nasal.

Síntomas: malestar, fiebre (en caso de infección), molestias al hablar o deglutir, tos, disfonía (si dura >3 semanas es indicación de consulta otorrinolaringológica), ocasionalmente estridor. La disnea inspiratoria aguda también puede estar provocada por edema laríngeo agudo debido a una reacción anafiláctica o angioedema.

Diagnóstico: se basa en el cuadro clínico y en la laringoscopia. En el diagnóstico diferencial deben tenerse en cuenta infecciones como tuberculosis, difteria y sífilis. Una laringitis crónica prolongada o la vocalización incorrecta pueden causar edema y favorecer la aparición de quistes, nódulos vocales (los denominados nódulos del cantante) o pólipos en las cuerdas vocales.

Tratamiento: el tratamiento sintomático consiste en eliminar los agentes irritantes, reposo vocal y humidificar el aire. Adicionalmente se utilizan AINE, antibióticos y —en caso de edema importante de las cuerdas vocales— glucocorticoides sistémicos. El tratamiento causal depende de la etiología. Las lesiones orgánicas hiperplásicas se tratan quirúrgicamente. En caso de epiglotitis purulenta está indicada la hospitalización. El absceso epiglótico es una complicación peligrosa de laringitis aguda, que se manifiesta con dolor laríngeo agudo, estridor y fiebre.