Cáncer de laringe

lat. carcinoma laryngis

ing. laryngeal cancer

En 2017, se registraron en Polonia ~2200 nuevos casos de cáncer de laringe, y ~1600 enfermos murieron a causa de esta neoplasia. El 95 % de los casos se debe a carcinoma epidermoide. Es la neoplasia más frecuente de la cabeza y cuello después del cáncer de tiroides.

El cáncer de laringe constituye ~2 % de todas las neoplasias malignas en Polonia y es 7 veces más frecuente en hombres (87 % de los casos registrados en Polonia en 2017; 90 % de los casos fueron fumadores), normalmente >50 años. Predomina la localización supraglótica (de peor pronóstico y desarrollo rápido) y glótica. En Polonia, más de la mitad de los enfermos acude al médico en fases avanzadas de la enfermedad con progresión local y metástasis ganglionares cervicales. Las metástasis a distancia son muy raras. Es frecuente la coexistencia con otra neoplasia primaria de las vías respiratorias superiores o del esófago debido p. ej. a la etiología común de estas neoplasias.

El cáncer de laringe puede ir precedido de lesiones preneoplásicas como leucoplaquia (displasia epitelial) (→fig. II.C.4-1), paquidermia (engrosamiento del epitelio) y papilomas. Son factores de riesgo del cáncer de laringe el tabaquismo, consumo de alcohol e infección por VPH (especialmente VPH-16 y VPH-18), y probablemente también la laringitis crónica, exposición a metales pesados, asbesto, ácido sulfúrico, polvo de madera y lesiones previas de la laringe.

Síntomas: el cáncer de glotis se manifiesta con disfonía crónica, mientras que el cáncer epiglótico, con odinofagia irradiada al oído y disfagia. Se pueden acompañar de tos, disnea y nódulo cervical palpable.

Diagnóstico: se debe realizar palpación del cuello (ganglios linfáticos), evaluar la movilidad laríngea y derivar al otorrinolaringólogo. En la laringoscopia se puede observar un tumor, infiltrado y/o inmovilidad de una o de ambas cuerdas vocales. El diagnóstico se basa en el examen histológico, por lo que es necesario obtener una muestra del tumor. Para la estadificación se utiliza la TC, ecografía con valoración de los ganglios linfáticos cervicales (eventualmente con biopsia) y del espacio preglótico, radiografía de tórax en 2 proyecciones, TC de tórax, RMN de cuello y, eventualmente, PET.

Tratamiento: radioterapia (estadios tempranos) o laringectomía parcial o total, normalmente junto a linfadenectomía cervical y radio- o quimioterapia (tratamiento adyuvante en estadios avanzados). En la actualidad se usan cada vez con mayor frecuencia terapias de preservación laríngea con técnicas endoscópicas con láser. En caso de metástasis a distancia, además de radio- y quimioterapia, actualmente se utiliza también la inmunoterapia (inhibidores de PD-L1). El pronóstico depende del estadio y localización de la neoplasia. La tasa de supervivencia a los 5 años varía entre un 30 % (enfermedad diseminada) y un 65 % (enfermedad localizada). El pronóstico es significativamente mejor solo en las localizaciones glóticas, sobre todo si la enfermedad no está avanzada (85-90 %).