Neumonía por Pneumocystis jiroveci (neumocistosis)

P. jiroveci (anteriormente P. carinii) es un microorganismo de aspecto similar a los protozoos. En la actualidad, basándose en el análisis del ARN ribosómico, este microorganismo se clasifica como hongo. P. jiroveci causa neumonías en personas con inmunosupresión celular o de tipo mixto.

El principal factor de riesgo de la enfermedad es la infección por VIH. En los enfermos con SIDA es la causa más frecuente de neumonía y muerte. El riesgo de neumocistosis también está elevado en caso de linfomas y leucemias, en pacientes trasplantados de órganos o de células hematopoyéticas/médula ósea y en enfermos en tratamiento inmunosupresor (con especial frecuencia en los pacientes que reciben glucocorticoides combinados con ciclofosfamida), así como en pacientes que reciben fármacos biológicos (alemtuzumab, infliximab, rituximab, entre otros).

La infección se produce por inhalación. El período de incubación dura unas semanas.

Cuadro clínico y diagnósticoArriba

Los síntomas más frecuentes de neumocistosis son fiebre, tos, habitualmente seca, y disnea. A diferencia de las personas inmunodeprimidas por otras causas, en pacientes infectados por VIH los síntomas pueden progresar muy lentamente, a lo largo de unas semanas o meses, antes de que el enfermo acuda al médico.

La gasometría de sangre arterial (en reposo o durante el esfuerzo) evidencia hipoxemia, a veces con hipocapnia y alcalosis respiratoria. Un indicador sensible, aunque poco específico, es la disminución de TLCO. El recuento de leucocitos en sangre es normal. En pacientes infectados por VIH aparecen anemia y linfopenia con reducción del recuento de linfocitos CD4+, a menudo <200/μl, y la actividad de LDH en suero está aumentada.

Al inicio de la enfermedad, en la radiografía de tórax pueden no evidenciarse lesiones. La imagen más frecuente muestra lesiones intersticiales, bilaterales y simétricas, en vidrio esmerilado (→fig. II.D.3-5A). En la TC de alta resolución generalmente se observan áreas extensas y simétricas en vidrio esmerilado (→fig. II.D.3-5B). Raras veces se describen consolidaciones alveolares aisladas o condensaciones limitadas a un lóbulo.

Es necesario un diagnóstico rápido e incluso invasivo. El diagnóstico consiste en la identificación de trofozoítos, quistes de P. jiroveci o la confirmación de la presencia del material genético mediante la técnica de PCR. El material más accesible es el esputo; también puede ser el esputo inducido, lavado bronquial o BALF. La sensibilidad del examen del esputo es de un 60 % y del BALF, de un 95 %. Raramente es necesaria la biopsia pulmonar (transbronquial o quirúrgica).

TratamientoArriba

El tratamiento de elección consiste en administrar cotrimoxazol (15 mg/kg/d de trimetoprim y 75 mg/kg/d de sulfametoxazol) iv. o VO repartido en 3 dosis diarias, durante 3 semanas. En pacientes que no toleran cotrimoxazol se puede utilizar pentamidina (4 mg/kg/d iv.) o clindamicina (600 mg cada 8 h VO) con primaquina (30 mg/kg/d VO), también durante 3 semanas.

En enfermos con PaO2 <70 mm Hg y P(A-a)O2 (gradiente alvéolo-arterial de O2) ≥35 mm Hg respirando aire ambiente se debe considerar añadir glucocorticoides (prednisona VO 40 mg cada 12 h durante 5 días, a continuación 40 mg/d durante 5 días y 20 mg/d durante los siguientes 11 días).

Los resultados del tratamiento son mejores en los enfermos infectados por VIH; la mortalidad es de <10 %, mientras que en los demás enfermos llega a un 30 %.

PrevenciónArriba

Tras finalizar el tratamiento en pacientes inmunodeprimidos y aquellos infectados por VIH, se administra a modo de profilaxis cotrimoxazol 960 mg VO 1 x d, todos los días o 3 días a la semana. Los enfermos con neumocistosis deben estar aislados de otros pacientes inmunodeprimidos.