En el examen por resonancia magnética (RMN) en las secuencias spin potenciadas en T1 y T2, realizadas en 3 planos con o sin refuerzo tras la administración iv. de un medio de contraste basado en gadolinio, se pueden evaluar las vías urinarias superiores e inferiores.
Para evaluar los vasos renales y la perfusión del parénquima, es necesario realizar una angio-RMN.
Indicaciones
1) Dudas diagnósticas en la evaluación de las imágenes obtenidas mediante TC, p. ej. en relación con:
a) diferenciación de los quistes simples con los complicados, abscesos, y con neoplasias poco vascularizadas o quísticas
b) sospecha de neoplasia, para confirmar el diagnóstico de angiomiolipoma o, en caso de carcinoma renal, evaluar la extensión de infiltrado neoplásico, sobre todo en el estadio III y IV con afectación de la vena renal y de la vena cava inferior
c) lesiones postraumáticas y posoperatorias
d) tumores suprarrenales: para diferenciar la etiología benigna de la maligna.
2) En personas con antecedentes de hipersensibilidad a medios de contraste yodados sustituye: a la TC con contraste.
Contraindicaciones →cap. I.B.4.4.
Una RMN estándar tiene limitaciones importantes en cuanto a la detección de calcificaciones y depósitos. En lesiones neoplásicas, la intensidad de la señal en las secuencias spin-eco sin administración de contraste en las imágenes potenciadas en T1 y T2 puede ser igual que en caso de parénquima renal normal. Por esta razón, ante la sospecha de una enfermedad neoplásica es necesario realizar una RMN con refuerzo de contraste. Las imágenes potenciadas en T1 (→fig. V.B.4-26) permiten diferenciar la corteza (hiperintensa) y la médula (hipointensa). En las imágenes potenciadas en T2 tanto la corteza, como la médula son hiperintensas.
Angiografía por RMN (angio-RMN) →cap. I.B.4.2.2.4.
Urografía por RMN:
1) Con el uso de imágenes potenciadas en T2, sin medio de contraste (urografía estática por RMN, static fluid-magnetic resonance urography, sMRU; →fig. V.B.4-27A): permite obtener imágenes muy legibles de las vías urinarias en enfermos con dilatación del sistema pielocalicial.
2) Con el uso de imágenes potenciadas en T1, con administración iv. de un medio de contraste (urografía por RMN con refuerzo de contraste, sin. urografía dinámica por RMN; →fig. V.B.4-27B): visualiza las vías urinarias normales y dilatadas, permite realizar una evaluación anatómica y funcional de los riñones, es especialmente importante en la evaluación de los segmentos distales de los uréteres y de sus salidas.
La fig. V.B.4-28 visualiza un quiste en la imagen potenciada en T1, mientras que la fig. V.B.4-29, un quiste en la imagen potenciada en T2.