Anticuerpos antipéptidos citrulinados

ing. anti-citrullinated peptide antibodies (ACPA)

Los péptidos citrulinados se forman como resultado de una modificación postraduccional de los péptidos que contienen arginina con la participación de la peptidil arginina desaminasa. La citrulinación de las proteínas extracelulares (p. ej. fibrina) e intracelulares (p. ej. vimentina) tiene lugar durante los procesos de inflamación (agudas y crónicas), apoptosis y queratinización. Las proteínas modificadas —que se encuentran en el espacio extracelular o se liberan a este— tienen propiedades antigénicas y estimulan la formación de anticuerpos dirigidos contra ellas. Los anticuerpos antipéptidos citrulinados (ACPA) reaccionan de manera específica con determinantes antigénicos con contenido en citrulina.

Además del proceso inflamatorio asociado a la artritis, el tabaquismo puede inducir la citrulinación de proteínas. Asimismo, las bacterias Porphyromonas gingivalis responsables del desarrollo de la periodontitis tienen la misma capacidad.

Material

suero o plasma

Método de determinación

Los ACPA se determinan en suero mediante métodos inmunoquímicos. En estos métodos, se usan péptidos cíclicos citrulinados (cyclic citrulinated peptides, CCP) sintéticos para detectar los ACPA. En la actualidad, hay disponibles 3 generaciones de pruebas para detectar los anticuerpos anti-CCP (CCP1, CCP2 y CCP3) que se diferencian por la estructura de los antígenos utilizados. Asimismo, se han diseñado nuevas pruebas de detección de anticuerpos antipéptidos citrulinados no cíclicos (p. ej. contra la vimentina citrulinada).

Valores de referencia

dependen del método, normalmente <5 UR/ml (UR, unidad relativa)

Utilidad clínica

 Los ACPA están presentes en un 60-70 % de los enfermos con AR, pero con poca frecuencia en otras enfermedades y en las personas sanas. Son uno de los criterios de clasificación de la AR, su sensibilidad es de 50-80 % y su especificidad de 90-98 % (la mayor de todos los marcadores serológicos conocidos de la AR).

En la práctica clínica, principalmente se realizan pruebas de detección de los anticuerpos ACPA de segunda generación (CCP2), que se caracterizan por tener una mayor especificidad. Los ACPA están considerados como un marcador serológico de la etapa inicial de la AR. Pueden aparecer varios años antes de que incidan los síntomas de artritis. Además, en los enfermos con AR, son un factor pronóstico independiente negativo en cuanto al desarrollo de erosiones, mientras que en los enfermos con una artritis indiferenciada aumentan el riesgo de desarrollar una artritis crónica erosiva.

Los ACPA también son un factor de riesgo independiente de complicaciones cardiovasculares en los enfermos con AR.

Los ACPA no se pueden utilizar para controlar la actividad de la AR.