Histiocitosis pulmonar de células de Langerhans

La histiocitosis pulmonar de células de Langerhans es una enfermedad en la que tiene lugar una proliferación descontrolada de células dendríticas de origen medular modificadas genotípica- y fenotípicamente, que desemboca en infiltrados que deterioran los tejidos adyacentes. La histiocitosis de células de Langerhans puede presentarse en una forma limitada a un órgano o multiorgánica. En los pulmones se forman nódulos localizados alrededor de los bronquiolos distales, que infiltran sus paredes y destruyen el parénquima pulmonar. La enfermedad se desarrolla casi exclusivamente en fumadores.

Cuadro clínico: tos y disnea de esfuerzo, a veces aumento de la temperatura corporal, pérdida de peso, sudoración, y dolor torácico. El primer signo puede ser el neumotórax.

Diagnóstico. Pruebas funcionales: normalmente disminución de la TLCO; a menudo patologías obstructivas con rasgos de hiperinsuflación pulmonar, a veces parcialmente reversibles. Radiografía de tórax: imagen normal (especialmente en la fase inicial de la enfermedad), alteraciones nodulares o reticulonodulares, simétricas, dispersas, de predominio en los campos superiores y medios. TC de alta resolución: nódulos de diferentes tamaños, a veces con lisis y multiformes, generalmente quistes de paredes finas; estas imágenes combinadas entre sí pueden adquirir forma de una hoja de trébol (imagen característica). Pruebas genéticas: en todos los enfermos para detectar la mutación V600E del gen BRAF, y en los pacientes con recidiva también de otras mutaciones de los genes de la vía MAPK-ERK.

Diagnóstico definitivo: cuadro clínico y radiológico compatible y presencia en el material histológico de granulomas con células de Langerhans; diagnóstico probable: cuadro clínico y TC de alta resolución. Durante la evaluación inicial del grado de enfermedad, además de la TC de alta resolución, en todos los pacientes deben realizarse, entre otros, la RMN de cabeza y de hipófisis y la PET-TC de cuerpo completo junto con la cabeza y las extremidades, y si se observan lesiones en los órganos, también las pruebas de imagen adicionales de los órganos afectados.

Diagnóstico diferencial: linfangioleiomiomatosis (en mujeres jóvenes), enfisema, neumonía intersticial linfoidea (anteriormente linfocítica), síndrome de Birt-Hogg-Dubé, enfermedad por depósito de cadenas ligeras.

Tratamiento: recomendación absoluta de abandonar el hábito tabáquico, observación y pruebas funcionales respiratorias (inicialmente cada 3 meses, luego cada 6-12 meses). Si los síntomas persisten o se produce un empeoramiento de las pruebas funcionales respiratorias → intentar el tratamiento con prednisona (1 mg/kg/d durante 1 mes, luego durante los siguientes 5 meses, ir disminuyendo la dosis hasta interrumpir el fármaco) o cladribina (6 mg/m2 en infusión iv. durante 5 días cada 4 semanas, realizar 6 ciclos). En caso de progresión de la enfermedad el tratamiento de emergencia es la citarabina. Para el tratamiento de las recurrencias o de la enfermedad refractaria puede considerarse el uso de los inhibidores de BRAF o de MEK, en función de la mutación detectada. Tratamiento de la hipertensión pulmonar →Hipertensión pulmonar. Se recomienda realizar la pleurodesis ya durante el primer episodio de neumotórax. Las alteraciones extensas limitadas a los pulmones y que cursan con insuficiencia respiratoria constituyen una indicación para el trasplante pulmonar. Se recomienda la vacunación sistemática contra la gripe, la COVID-19 y contra el neumococo.