Traumatismos abiertos del globo ocular

Mecanismo y consecuencias

1. Rotura del globo ocular: herida transmural del globo ocular producida por un objeto contundente. El globo ocular está lleno de líquido que no se comprime, por lo que su traumatismo produce un aumento temporal de la presión intraocular. Puede romperse:

1) en el sitio del traumatismo

2) en el sitio en el que la esclerótica es más débil, generalmente alrededor del limbo de la córnea, debajo de las inserciones de los músculos oculomotores, alrededor del nervio óptico

3) en el sitio de la herida, p. ej. tras una cirugía (de cataratas, etc.).

2. Traumatismo penetrante: herida transmural del globo ocular producida por un objeto punzante, por lo general cuchillo, vidrio, pedazo de madera. Con frecuencia se visualiza la herida de entrada, pero puede llegar a cerrarse o estar enmascarada debajo de la conjuntiva o por un hematoma. A través de la herida de entrada se produce un escape de líquido del globo ocular o de estructuras intraoculares. En el caso de herida en la córnea frecuentemente se visualiza una pupila irregular y dentro de la herida se encuentra el iris parcialmente desplazado. En la cámara anterior puede haber sangre. En caso de traumatismo de la esclerótica, por lo general se produce extravasación de sangre debajo de la conjuntiva del globo, siendo visible la banda oscura del coroides en la herida. En ambos casos puede haber salida del cristalino o del cuerpo vítreo fuera del globo ocular.

3. Traumatismo perforante: dos heridas transmurales del globo ocular producidas por el mismo objeto, por lo que está presente la herida de entrada y de salida. Es frecuente encontrar un cuerpo extraño en el orbital.

Actuación

Igual que en el caso de la contusión del globo ocular. Realizar profilaxis antitetánica →Difteria y tétanos. Con urgencia referir al paciente al servicio de oftalmología.