Ejercicios aeróbicos y la influencia en las lipoproteínas

Ejercicios aeróbicos

Los ejercicios aeróbicos (EA) son un tipo de entrenamiento durante el cual la FC y el volumen respiratorio aumentan, lo que permite que las reservas de oxígeno satisfagan la demanda de los músculos. Los estudios demostraron que la duración del EA (bicicleta, natación continua o marcha durante mínimo 15 minutos) fue el parámetro que más influyó en los resultados.¹¹

Los investigadores que estudiaron estos entrenamientos se interesaron principalmente por la relación entre el EA y el C-HDL.¹² Descubrieron que la concentración de C-HDL era más sensible al ejercicio aeróbico que las de C-LDL y triglicéridos (TG).¹² Cuando el ejercicio alcanzó el 64,8 % de la capacidad aeróbica máxima, la concentración de C-HDL aumentó en 2,53 mg/dl.¹¹ El C-HDL2 y el C-HDL3 también se midieron por separado y se observó que después del ejercicio aeróbico, la concentración de C-HDL2 aumentó aprox. un 11 %,¹³ y la concentración de C-HDL3 disminuyó.¹⁴ Este resultado estuvo causado por alteraciones en el tamaño de las partículas creadas por el EA.¹⁵ Otro estudio también demostró que el cambio en las concentraciones de C-HDL2 y C-HDL3 en plasma causado por el entrenamiento aeróbico fue independiente del tejido adiposo o la dieta.¹² Otras investigaciones presentaron la relación entre las concentraciones baja de C-HDL y alta de TG al principio del ensayo, y el mayor aumento del C-HDL (4,9 %).¹⁶ Se comprobó la influencia de la cantidad y la intensidad de los ejercicios, así como los cambios en las lipoproteínas. Para modificar la concentración de C-HDL de forma significativa, aunque ligera, hicieron falta muchos ejercicios de alta intensidad.

Al contrario que con el C-HDL, la influencia del EA en el C-LDL fue inconsistente y fue necesario analizar esta fracción de lípidos.¹² Esta discrepancia entre estudios puede deberse a cambios en la masa corporal. Los estadísticos señalaron que la disminución de C-LDL por kilogramo de masa corporal es de aproximadamente 0,8 mg/dl.¹² Sin embargo, es fundamental medir la fracción de C-LDL, ya que puede que después del EA no se produzcan cambios significativos en el C-LDL, pero la concentración del C-LDL aterogénico pequeño y denso puede disminuir, mientras que la concentración del C-LDL más grande y flotante puede aumentar.^17,18