Tratamiento
En 2023 se introdujeron cambios importantes relativos al tratamiento farmacológico. Se modificó tanto el tratamiento inicial preferido en algunos grupos de enfermos, como las opciones sugeridas de cambio en caso de que este resulte ineficaz. Se simplificó el manejo inicial: véase la tabla 1. En el informe se observó que el tratamiento con fármacos compuestos (que contienen >1 medicamento) puede resultar más eficaz y más cómodo para el enfermo.
Tras elegir el tratamiento inicial, es necesario realizar controles periódicos del enfermo, evaluando, entre otros:
1) los síntomas (utilizando escalas de gravedad)
2) la presencia de exacerbaciones
3) la técnica de inhalación de fármacos y la adherencia a las recomendaciones por parte del enfermo
4) el tratamiento no farmacológico utilizado
5) el tabaquismo y la exposición a otros factores nocivos
6) la actividad física y las indicaciones para la rehabilitación
7) el control de los síntomas por parte del enfermo y el plan de actuación por escrito
8) la necesidad de utilizar la oxigenoterapia, ventilación no invasiva, tratamiento intervencionista y paliativo
9) las enfermedades concomitantes.
La espirometría debe realizarse ≥1 vez al año.
El ajuste del tratamiento se basa, como hasta el momento, en la evaluación de la presencia de exacerbaciones o de disnea (fig. 2). La actuación en enfermos con exacerbaciones y disnea es igual que en aquellos con exacerbaciones sin disnea.
En el informe se presta mucha atención al manejo no farmacológico (tabla 2), subrayando el papel de la técnica correcta de utilización de inhaladores. En el tratamiento inhalatorio es necesario, sobre todo
1) a la hora de seleccionar el tipo de inhalador: tomar en cuenta el estado del enfermo (incluidas las funciones cognitivas y manuales), así como su opinión y preferencias
2) en la medida de lo posible, utilizar 1 tipo de inhalador y no cambiarlo sin que sea necesario
3) verificar la técnica de inhalación con regularidad, pidiendo al paciente que muestre en el consultorio cómo toma el fármaco (también puede ser verificado por el personal de enfermería o fisioterapeuta).
También se ha comentado detalladamente el problema de falta de adherencia a las recomendaciones médicas, observando que puede afectar a >50 % de los enfermos.