Enfermo después de la corrección de la transposición de las grandes arterias

La corrección fisiológica de esta cardiopatía (auricular, técnica de Mustard, técnica de Senning) consiste en la escisión del septo interauricular y la sutura de uno nuevo de tal manera que el drenaje de las venas de la circulación mayor se conduzca al ventrículo izquierdo desde el cual sale el tronco pulmonar y el drenaje de las venas pulmonares se conduzca al ventrículo derecho (que participa en la circulación mayor) desde el cual sale la aorta. De esta manera, la función cardíaca después de la intervención no es muy diferente de aquella en la transposición de las grandes arterias congénitamente corregida. Las secuelas a largo plazo más frecuentes después de este tratamiento:

1) estenosis de los túneles intraauriculares

2) insuficiencia de la válvula tricúspide (sistémica)

3) cortocircuito interauricular residual

4) alteraciones del ritmo cardíaco

a) enfermedad del nodo sinusal

b) taquiarritmias auriculares

5) obstrucción del tracto de salida del ventrículo izquierdo

6) disfunción del ventrículo derecho (que participa en la circulación mayor)

7) insuficiencia cardíaca.

La corrección anatómica de esta cardiopatía (el denominado switch arterial) propuesta por Jatene restaura la conexión ventriculoarterial normal, ya que se pasa la aorta al ventrículo izquierdo y el tronco pulmonar al ventrículo derecho. La cirugía se realiza en los primeros días de la vida de un niño, antes de que baje la presión pulmonar y la presión en el ventrículo izquierdo, el cual después del procedimiento participará en la circulación mayor. En la actualidad, es el tratamiento de elección en los recién nacidos con transposición de las grandes arterias. Las complicaciones más frecuentes de esta cirugía incluyen:

1) isquemia del ventrículo izquierdo tras el reimplante coronario

2) estenosis en el lugar de corte y reimplante de las grandes arterias

3) insuficiencia de la válvula neo-aórtica

4) obstrucción del tracto de salida del ventrículo derecho.

En caso de pacientes tras una corrección fisiológica el embarazo no está absolutamente contraindicado, siempre y cuando el resultado de la cirugía sea muy bueno. No obstante, se desconoce el efecto a largo plazo sobre el ventrículo derecho (el desarrollo del embarazo y las complicaciones se asemejan a aquellos presentes en la transposición de las grandes arterias congénitamente corregida →cap. I.H.8.12). Es necesario el seguimiento estricto del embarazo.