Enfermedades por inflamación e infiltración de la hipófisis

1. Aracnoiditis periquiasmática en el curso de encefalitis o meningitis bacterianas →cap. IV.A.3.1.4.

2. Hipofisitis granulomatosa

Puede presentarse en el curso de la sarcoidosis, tuberculosis, sífilis, histiocitosis de las células de Langerhans o poliangitis granulomatosa (granulomatosis de Wegener). También se observa hipofisitis granulomatosa de células gigantes (giant cell granulomatous hypophysitis).

3. Hipofisitis linfocitaria

Se caracteriza por la presencia de autoanticuerpos dirigidos contra antígenos hipofisarios propios, y por infiltrados linfocitarios y de células plasmáticas. Se produce con más frecuencia en mujeres y puede estar asociada al embarazo y al período posparto; a menudo coexiste con otras enfermedades autoinmunes (p. ej. la enfermedad de Hashimoto). Se manifiesta con una insuficiencia suprarrenal, gonadal e hipotiroidismo secundarios de desarrollo gradual, hiperprolactinemia moderada, a veces diabetes insípida y trastornos neurológicos asociados a la presencia de infiltrados linfocitarios. La hipofisitis linfocitaria puede cursar también con un déficit aislado de ACTH y síntomas de insuficiencia corticosuprarrenal secundaria. El diagnóstico se establece mediante una RMN de la hipófisis, que revela una fuerte saturación de las lesiones infiltrativas tras administrar el contraste (→fig. IV.A.4-3). El tratamiento consiste en compensar los déficits hormonales y administrar glucocorticoides en caso de síntomas neurológicos intensos. En general, se logra una mejoría clínica y reducción de la extensión de las lesiones infiltrativas que afectan a la hipófisis.