Bronquiolitis

lat., ing. bronchiolitis

Las bronquiolitis son frecuentes, aunque rara vez llegan a provocar síntomas. Normalmente acompañan a las enfermedades pulmonares intersticiales, enfermedades bronquiales (bronquiectasias, EPOC, asma) y fibrosis quística.

En el presente capítulo se describen las enfermedades en las que la bronquiolitis es la patología principal.

La clasificación actual de bronquiolitis incluye:

1) bronquiolitis obliterante

2) bronquiolitis aguda

3) bronquiolitis difusa

4) bronquiolitis por exposición a sustancias que alcanzan directamente a los pulmones, como el tabaco (bronquiolitis respiratoria), polvos minerales, dióxido de nitrógeno (almacenes de granos), dióxido de azufre (exposición profesional, gases tóxicos), diacetilo (utilizado en la industria alimentaria, da sabor a mantequilla; o exposición, p. ej. en las fábricas de palomitas de maíz), cloro (exposición doméstica o industrial, gases tóxicos), fosgeno (pesticidas y gases tóxicos), polvos que se liberan durante la manipulación del algodón y texturización de nailon (proceso de obtención de fibras sintéticas cortas, en la producción de ciertas telas, p. ej. de peluche; la exposición puede causar la denominada flock disease), contenido gástrico (aspiración aguda o crónica recurrente puede causar bronquiolitis por aspiración)

5) bronquiolitis por consumo de sustancias tóxicas, como la penicilamina, oro o Sauropus androgynus (→cap. II.C.11.1).

También existe una clasificación que incluye los cambios histopatológicos y radiológicos mediante TC de alta resolución (que depende de ellos en cierto grado). Distingue los cambios proliferativos (celulares) y fibróticos. De acuerdo con esta clasificación, todos los tipos anteriormente mencionados pertenecen al grupo de cambios proliferativos, excepto la bronquiolitis obliterante.